español english français česky

Expedición - primer aniversario, hay que decir, porque, si Dios quiere, habrá más aniversarios durante esta Expedición.

Por aridez y más aridez, llegamos a nuestra nueva meta, un sorprendente oasis de bañados formados por el río Grande; tanto más sorprendente, este oasis de bañados, que sabíamos, por haber cruzado el río Grande varias veces, que está siempre a punto de rendir el alma y desaparecer de esta Tierra.

Quisimos ver estos bañados porque son la morada invernal de miles y miles, se dice que centenares de miles, de pájaros migratorios y nos preguntábamos si, a lo mejor, fin de octubre ya sería parte del invierno aviar. Ahora sabemos. Fin de octubre no es parte del invierno aviar. Vimos bastante patos y pájaros vadeadores, pero nada que se pueda llamar una romería aviar.

Lo que sabíamos que no iríamos a encontrar eran las partidas de Apaches que, en sus tiempos, solían resguardarse durante los inviernos en la comarca.

Estamos siguiendo, pues, hacia nuestra próxima meta, la famosa caverna de Carlsbad.

Siempre la aridez; con terreno chato; y la carretera, recta al infinito.

Ahá, la topografía cambió a lomas, y la carretera a curvas.

Anochece.  Paramos, al lado del camino no más.

. .
*

Amanecimos con rugidos varios y raros.

Resulta que pernoctamos cerca del campo de ensayos de cohetes de White Sands, el White Sands Missile Range; están probando sus cohetes para la próxima.

Siguen las lomas; en la distancia, hasta hay sierras, pero apenas visibles detrás de lo que nos tememos es contaminación ambiental, aun en este lugar desolado. En este país, parece que hay contaminación aun dónde lógicamente tendría que no haberla.

Estamos atravesando un campo de lavas. Debe de ser bastante viejo porque ya tiene algo de vegetación. Nos paramos para tomar una fotografía de un cactus creciendo en la lava negra.

Pasó por la carretera un convoy militar llevando a gran velocidad tanques y otros vehículos en transportadores ad hoc. Con los aviones militares que, desde esta madrugada, están dando sus vueltas en el cielo, no es como para olvidarnos de la próxima.