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otra vez, el peligro de desliz, en alud, de una capa superior sobre la inferior.

* También estudian factores externos a la nieve - vientos, radiación solar, humedad, tanto del momento como en su evolución.

* Y cuando creen que un alud está por ocurrir, simplemente llaman a los artilleros.

Tal como lo vimos de tanto en tanto a lo largo de la carretera, hay bases para cañones; y cuando hace falta, los artilleros colocan allí sus cañones sin retroceso de 105 milímetros y cañonean las laderas peligrosas para provocar aludes controlados, cuándo y cómo lo quieren, sin peligro para los viajeros.

Cañonean hasta en verano; en verano, contra laderas sin nieve. Y no por saña destructiva. Porque, en la época de aludes, las laderas están, con frecuencia, totalmente invisibles en sus bonetes de nubes, y los artilleros tienen que disparar literalmente a ciegas, en base a datos de puntería acumulados en época de clara visibilidad, en verano.

Anchorage.

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Estamos por pasar una segunda noche en Anchorage. Esta vez, en el tranquilo recinto de la Universidad de Alaska porque justamente acabamos una larga entrevista con una estación de radiodifusión cultural, o sea no comercial, de interés público, parte de la Universidad de Alaska y parte de la NPR o sea la National Public Radio, o sea la red nacional de radiodifusión no comercial.

Y será con alivio y gratitud, porque la primera noche en Anchorage fue un baño de ruido diurno sin omitir un minuto. Quizás se deba a que, en esta época del año, no obscurece totalmente nunca, en contraste con las larguísimas noches invernales, y que la gente aprovecha esta libertad estival.

Después de este sesquidía en Anchorage, tenemos la impresión de que pasamos un sesquidía en un mini-mini-Nueva York. Hay gente, desde muy elegante a vaga, desde blanca a negra, desde socialmente adaptada a rebelada, desde lo que se considera comúnmente sana a trastornada mental. Hay negocios para turistas, bien puestos, y turistas, del tipo bien forrado. Inclusive, hay aquellos volantes hechos a mano, pegados caseramente en las esquinas, escritos en castellano, y cantando las alabanzas de la iglesia-de-Cristo tal o de la iglesia-de-Cristo cual. Las librerías están divididas en dos tipos: un tipo, para lectores adultos, y otro tipo, para, se supone pues que niños, con libros de filosofía, historia, geografía, viajes y las grandes obras de la literatura >>>>>>>>