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conceptos, hasta entonces, ya sea sofocados bajo la piedra tumbal de dogmas, o en un estado especulativo de imposible comprobación física.

Fueron hechos, espirituales, como el derrumbe de dogmas por realidades incontrovertibles, y fueron hechos, físicos, como el conocimiento palpable de la Tierra entera, hogar de la humanidad, sin las dudas y polémicas anteriores, que desataron las mentes europeas de las limitaciones religiosas y seculares y las abrieron a nuevos horizontes.

De ahí, las convulsiones, sociales y religiosas.

→ Convulsiones sociales, por los relatos de que las sociedades indígenas americanas eran más simples, democráticas, que la camisola de fuerza social europea.

Convulsiones religiosas, por la evidencia de que la biblia, o su interpretación oficial, desconocía, y no tenía explicación para, tantas cosas nuevas que no cabían en los dogmas tradicionales.

Sin el descubrimiento de América, ¿hubiese podido Darwin, según es el mito - otro mito, propugnar la teoría de la evolución de las especies? o, según es la realidad, ¿sin América, hubiesen podido Alfred Wallace y Charles Darwin, por separado si bien contemporáneamente, juntar sus datos alrededor del globo, y querer publicarlos en un ensayo mancomunado, en sus tentativas de validar y explicar la teoría del origen de las especies por evolución natural sentada por Erasmus Darwin, demasiado desconocido abuelo del demasiado conocido Carlitos?

Sin el descubrimiento de América, ¿cómo y cuándo hubiese madurado la revolución francesa - si es que hubiese madurado? Y ¿quién hubiese ayudado en la redacción de su Constitución? (...Constitución de Libertad, Igualdad, Fraternidad, en víspera de tratar de re-aplastar los Negros de Haití en esclavitud - sin éxito - y en víspera de imponer su estilo de libertad, igualdad, fraternidad, hasta las puertas de Moscú - sin éxito ...)

Además, todas las solemnes y glorificadas democracias del hoy moderno - aunque, en algún caso, de sólo dos partidos sean, y partidos parecidos como mellizos, dejando las demás filosofías gubernamentales fuera del gobierno - todas remontan, no a ese par de revoluciones, una de cada lado del Atlántico, sino a la fuente primaria a la cual estas dos revoluciones, a su vez, también remontan, a la influencia de la América precolonense sobre la Europa pos-colonense.

Hasta en el cosmos reverberó el descubrimiento de América. Sin el vigorizante efluvio de liberalización intelectual permeando el ambiente ¿hubiese escuchado Koperník, o Copernicus, o cualquiera de diez otras maneras de escribir el nombre, la vocación - él, un canónigo - de destruir el dogma científico-eclesiástico del geocentrismo y geostatismo, con la reintroducción de conceptos de Antiguos como Niquetas, Filolaos, Heracleides, Ecfantos, >>>>>>>>>>>>>>