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antediluvianas y con continentes hundidos; pero no es porque a algún visionario se le ocurrió asignar a Chichén Itzá fechas insensatas y una relación con algún Can asiático, por lo de Cuculcán, que Chichén Itzá no existe; y no es porque a algún visionario se le ocurrió hundir un continente en pleno Pacífico con vestigios de su cuerpo y de su arte como la isla de Rapa Nuí y sus enigmáticas macro-estatuas, que la isla de Rapa Nuí y sus estatuas no existen.

Y la misma consideración se podría aplicar a este caso: librarlo de sus estigmas visionarios y tomarlo por su esencia tal como es - lo que no significaría darle autenticidad, pero por lo menos plausibilidad digna de ser investigada.

Este primer caso podría tener por rubro:

El misterio Niven, Hurdlop, y nadie-sabe-nada.

► Descubrimientos de Niven.

* Descubrimiento A.

A "46 kilómetros al norte de Ciudad México" Willian Niven descubrió, en los años 1921 y siguientes, tres capas de civilizaciones; las dos capas superiores, aplastadas por sus respectivos estratos de rocas y arena, y la capa más profunda, a 7,5 metros, cubierta y conservada por cenizas - debiéndose destacar que, curiosamente, las dos capas más recientes, con restos de ocupación humana más transitoria y primitiva, y la capa más profunda y antigua, con vestigios de una cultura más desarrollada.

En esta capa, la más profunda, Niven dio con restos de habitaciones en algunos de más de cien pozos diferentes excavados en un área de unos 30 x 15 kilómetros  - pozos cavados no por él sino, durante varias generaciones anteriores, por constructores en busca de materiales de construcción, pero astutamente aprovechados por él.

En un lugar específico, el más importante, encontró:

una edificación, dilapidada como todas, hecha de piedras asentadas en un >>cemento blanco;
• una puerta de madera (petrificada);
• artefactos varios;
• muchos huesos humanos que se hacían polvo al tocarlos;
un taller de orfebrería completo, con chimenea, modelos, un pectoral de >>oro;
• murales en rojo, azul, amarillo, verde y negro;
un friso en rojo oscuro y negro, cubierto con una capa de cera que lo >>preservó perfectamente, ilustrando la vida de una persona desde su >>nacimiento hasta su muerte;
debajo del piso, una tumba con un esqueleto con su cráneo todavía con el >>>>>>>>