O El conjunto simbolizaba el principio, la evolución y el inevitable fin del cosmos.

O Los cuatro cuadrángulos alrededor del círculo central - un círculo dentro de muchos otros, todos concéntricos - simbolizaban las cuatro eras por las cuales el cosmos ya había pasado antes de llegar a la quinta era, entonces en curso. Incidentalmente, los Aztecas tenían la misma palabra para cada una de esas eras y para el Sol; así que hablaban de cuatro soles idos y del quinto - y final - sol, en el cual vivían, siempre en peligro de terminar.

O El pequeño cuadrángulo en el ápice indicaba la fecha de la creación del Quinto Sol, 13-Junco, o sea 1011, bastante reciente.

O El motivo "olin", entre el primer y segundo círculos concéntricos desde el centro, indicaba la fecha - no una fecha absoluta e única en el flujo del tiempo sino una fecha potencial y repetible cada 52 años - de la futura destrucción del Sol, Quinto, y, más dramáticamente, Final; fecha que siempre quedaba la esperanza de poder sobrevivir - los dioses mediante, y con los apropiados sacrificios humanos y solemnidades - hasta la próxima tal fecha, 52 años más tarde - toda una "centuria" de 52 años más tarde, para deleitarnos con la inenarrablemente estúpida terminología impresa negro sobre blanco por ciertos doctorados eruditos.

Pero no hay que pensar que todo es sosiego y armonía en el mundo académico. Debajo de la película de las aparentemente satisfactorias suso-anotadas elucidaciones, se enfrentan dudas y opiniones encontradas - por ejemplo, dudas: ¿es la cara, dentro del círculo más central, el dios del Sol o el dios de la Tierra?; por ejemplo, opiniones: su lengua radia e insufla vida; su lengua saborea la sangre de sus víctimas. Y se abre el abismo de los centenares de otros componentes del grabado, que otra clave de explicación que la imaginación de los arqueólogos no tienen, incluyendo el simbolismo de la colorización de cada detalle, que era parte de la obra original.

Dicen los especializados.

El diagrama, a más de cronográfico, es también religioso, con características crotálicas yucatecas derivadas de conceptos mayas - con sólo algunos elementos agregados.  En lo ofidio, el diagrama incluye:

→→Las cejas típicamente crotalenses de las dos serpientes que ciñen el disco. Serpientes no-crotalenses no tienen esta ceja distintiva.
→→Los apéndices labiales de estas mismas serpientes.
→→Cascabeles en diversos grados de estilización.