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Esta mañana, otro trecho del golfo de México.

Casi llegando a un paraje de nombre ... Acapulquito; pero, desvío hacia tierra adentro.

Un poco de cañaverales, un poco de citros, un poco de matorrales, y las infaltables quemas.

Edzná.  Veamos.

Sorpresa.

Venimos a Edzná por la razón, frívola si se quiere, de la analogía entre sus hileras de puertas en los varios pisos de su zigurat templario y las hileras de nichos en el zigurat de El Tajín, quitándole a éste su exclusividad en este estilo, por obra de los Mayas.


Edzna

Nos encontramos con mucho más, a más del Zigurat de las Puertas; no sólo en cantidad de construcciones, sino, especialmente, en las relaciones espaciales de las construcciones entre sí.

De primer impacto - con media incredulidad, medio desafío - tuvimos la convicción de que eso no es maya, no puede ser maya; aquí, nada del amable desparramiento asimétrico, un poco aquí, un poco allá, que, por lo visto hasta ahora, nos había parecido el concepto espacial maya;
-aquí, todas las estructuras, dispuestas con implacable organización espacial para lograr una monumentalidad más allá de la monumentalidad de cada estructura;
-aquí, frente al Zigurat de las Puertas, no un amplio espacio vacío al natural sino una amplia explanada con, incluso, en su medio, un cuadrilátero a manera de podio, provisto de un mojón (que, de inmediato, nos hizo pensar en el intihuatana de los Quechuas);
-aquí, no una explanada así no más, sino con acceso enmarcado y solemnizado por dos plataformas templarias menores;
-y, aquí, todo ello, equilibrado, a su vez, más allá de otro amplio espacio, por una larguísima maciza poliplataforma de escalones inhumanos, poliplataforma que, para mejor contrapeso visual, otrora llevaba un edificio, por los tocones de pilastras que quedan.

Aquí, pues, nada de acreciones más o menos antojadizas, sino una planificación global. ¿Cómo explicarlo? En el momento, no hubo explicación. El notar glifos mayas no sirvió para convertirnos al mayaísmo del sitio sino para aumentar nuestra desazón.

También notamos el uso, a más de las pilastras, de columnas - tanto de mampostería, a veces redondas en toda su longitud, a veces, curiosamente, con >>>>>>>>