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El guión propuesto por estos nuevos vikingólogos es así:

- Entre las muchas migraciones, por muchos medios, desde muchos lugares, sobre muchos milenios, hacia América, en algún momento antes de la era cristiana, llega a las costas de América del Sur una migración de proto-Malayos Polinesios, que se ramifica y da origen a los Caribes, los Arahuaques (o Aruaques), y los Avaetes, o sea Guaraníes. Los Guaraníes, o sea Avaetes, con su idioma para-sintético malayo-polinesio, se afincan en lo que hoy es el Paraguay y alrededores hasta el mismo océano Atlántico, aproximadamente a principios de la era cristiana.

- Por otra parte, aproximadamente diez siglos más tarde, en el siglo X, mientras las partidas de Vikingos guiadas por Erik El Rojo, su hijo Leif, y otros, recorren las costas, de Groenlandia, de la conislación canadiense, de Terra Nova, y otros sitios, otra partida de Vikingos, guiada por Ulman, alcanza Yucatán - donde hay, sabemos nosotros de otra fuente, un indicio que podría ser vestigio de la presencia de los Vikingos allí.

- De Yucatán hacia el sur, los Vikingos ya no emprenden viajes relámpagos sino que empiezan a trasladarse muy lentamente sobre décadas y generaciones, llegando así, ya no Vikingos originales sino descendientes de Vikingos, en el siglo XI o XII, a los Andes peruanos-bolivianos, y dispersándose allí, hacia el año 1290.

- Parte de estos descendientes de Vikingos - de la rama germana de los Ingaevones - se vuelve la casta gobernante de los Aimaraes, Quechuas y demás, o sea se vuelve los incas, más correctamente los ingas como todavía sobrevive, según vimos, en el Ingapirca de Ecuador - casta gobernante que, todo el mundo está de acuerdo, era de otra raza y con otro idioma que sus súbditos;
  • parte llega hasta la isla de Rapa Nuí;
  y parte aparece, a principios del siglo XIV, en el Paraguay de hoy, mezclándose con grupos de Avaetes, o sea Guaraníes, trayendo consigo elementos, o recuerdos de elementos, de su cultura e idioma, y dando así origen a los Ashes o sea Guayaquíes, los famosos "indios blancos" que, en su estado actual, no son primitivos sino degenerados de un estado mejor. Justamente, una parcialidad de estos "indios blancos" todavía existe cerca del yacimiento arqueológico de cerro Guazú.

Así sería la influencia vikinga en el Paraguay, lo que está muy lejos de decir que los Vikingos como se los concibe habitualmente estuvieron en el Paraguay.

Con respecto a este tema, volvimos al Museo Etnográfico para hablar con su Directora, una Yugoslava muy respetada por su integridad científica. Apenas se enteró del tema, declaró perentoriamente que no quería escuchar nada, del tema o de sus proponentes, y justificó su santa ira con el irrefutable argumento, subrayado por un exasperado ademán de la mano, de "y ¿cómo podrían haber llegado los Vikingos hasta aquí?". Irresistible razonamiento científico torpedeando los indicios pro Vikingos-en-Paraguay presentados.