español english français česky


. .
*

Hoy, jueves.

El trabajo dental va adelantando. Nosotros seguimos percibiendo cosas alrededor de nosotros. Inclusive, se nos dio por leer los diarios; y también escuchamos la radio a pesar de no tener un minuto de ocio jamás, con el atraso que tenemos en nuestro trabajo de escritorio.

Este martes pasado, los diarios nos dieron los siguientes titulares: "Helicópteros y aviones del gobierno dejan caer toneladas de bombas al norte caucano" - nosotros tendremos que cruzar la provincia de Cauca, pero todavía no sabemos exactamente por dónde; "Cinco militares inhumados con honores"; "119 víctimas de la violencia en cuatro meses y medio en zona de Urabá" - que es la zona por donde pasamos cuando emergimos del Tapón del Darién por Turbo; "Drásticas medidas contra los narcotraficantes"; "Desmantelada red de narco-guerrilleros".

Este miércoles pasado, ayer, los diarios nos trajeron una historia que podría ser el guión de una película, con todos los ingredientes necesarios:

<> un predio rural de muchos miles de hectáreas en una zona difícil de vigilar pero a solamente dos horas de vuelo de Bogotá;

<> una poderosa central de comunicaciones radiofónicas alimentada por una planta electrógena propia, para enlaces con el Perú, Bolivia, Venezuela, las islas del Caribe, Vespuccia, controlando todo el tráfico de narcóticos;

<> una pista de aviones dotada de modernos equipos de aeronavegación, incluyendo una gigantesca antena aérea atendida por un radio-operador;

<> tres aviones aterrizando regularmente con pasta de coca del Perú y de Bolivia;

<> un taller de mantenimiento de los aviones;

<> procesamiento de la pasta en varios centros de refinamiento, dotados de los más modernos equipos;

<> y, naturalmente - porque ningún guión sería completo sin ello - la gran dama de la coca, una mujer casada con otro, pero amante de uno de los grandes capos del tráfico de narcóticos y también, se dice, de armas para los guerrilleros; los traficantes obteniendo armas para los guerrilleros y los guerrilleros defendiendo a los traficantes.