Después de una epopeya según lo susodicho, finalmente llegamos al dichoso muelle. Pero las nuevas no son buenas; parece que, simplemente, no hay barco de cabotaje que sea capaz de embarcar y acomodar el tamaño y los 4.000 kilogramos de nuestro vehículo; habrá que tomar un barco de alta mar desde Balboa directamente al puerto colombiano de Buenaventura.

También escuchamos, hoy, otra versión más de por qué no se está abriendo la comunicación terrestre entre Panamá y Colombia, vale decir el último impedimento en la comunicación terrestre entre una punta y la otra de todo el continente americano: es que el abrir el paso por la vía terrestre podría, por lo menos en el caso de ciertas mercaderías, perjudicar el tráfico por el Canal.

Y hay otra versión más: simplemente, la falta de dinero. Según esta versión, lo que se construyó hasta ahora de la "carretera panamericana" por el Darién, o sea hasta Canglón, fue financiado por los Vespuccianos; y nos consta que, cuando, durante los preparativos de esta Expedición, queríamos averiguar el estado de los trabajos de la carretera, teníamos que dirigirnos no a alguna dependencia del gobierno de Panamá en Panamá sino directamente a una oficina del gobierno vespucciano en Washington. Y, según esta versión, mientras los Vespuccianos todavía esperaban que no se verían obligados a aceptar un cambio en el tratado de propiedad de la zona del Canal, utilizaban el financiamiento de esta carretera para ablandarle el corazón a los Panameños; pero ahora que los Panameños les obligaron a revisar el tratado del Canal, los Vespuccianos ya no tienen el más mínimo incentivo en gastar dinero en la carretera del Darién.

Es curiosa la cantidad de razones que se aduce para el estancamiento en la conexión terrestre entre Panamá y Colombia; a ver si nos acordamos:

» para que no pase la fiebre aftosa del sur al norte de América;
» para que no pasen los maleantes colombianos a Panamá;
» para no poner en peligro la soberanía panameña todavía no bien afianzada en >>el Darién;
» para no causar una posible merma en el tráfico del Canal;
» porque a los Vespuccianos ya no les interesa más gastar dinero en un Panamá >>que ya no es totalmente la obediente colonia vespucciana que era;
» y no sabemos si no nos olvidamos de alguna otra razón.

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\CP/  Esta mañana, durante el desayuno.  
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Escuchamos los  comentarios  de un periodista sobre temas de actualidad, y fue la primera vez que escuchamos una persona que no es un actor hablar con la inspiración y la expresión que se supone ser características exclusivas del estilo histriónico de los actores.  El tema tratado no era para menos: parece >>>>>>>>