español english français česky

fabrican una gran variedad de productos, como ser rieles de ferrocarril, alambre de púas, clavos.

Llegamos a Pueblo, nos fuimos de Pueblo, y no vimos cómo se fabrica rieles de ferrocarril, alambre de púas, clavos: nos encontramos con que la fábrica, una empresa de gran envergadura, está paralizada; una situación no del todo sorprendente: toda la industria metalúrgica de Vespuccia está aplastada por la competencia japonesa.

Mala suerte para nosotros, y peor para la empresa.

Seguimos camino, pues; por una topografía, ahora, un poco más ondulada, pero sin más sierras, salvo en la lejanía; siempre hacia el sur.

Desde Denver, estamos en un ambiente cada vez más hispano; se ve, comúnmente, nombres de pueblos y de calles, españoles. Es que estamos otra vez en lo que era parte de México antes del robo; y nos estamos acercando al México de hoy.

Podemos decir que ya estamos en América Hispana.

Estamos pensando más a menudo, y cada vez con más preocupación, en la guerrilla que nos espera en Honduras, Nicaragua y El Salvador. ¿Pasaremos - no pasaremos?

Acabamos de visitar uno de nuestros objetivos en esta zona: el monumento nacional Great Sand Dunes, o sea Médanos Grandes. Se trata de médanos sobre una superficie de unos 130 kilómetros cuadrados, y en alturas de más de cien metros.

Su extensión no se aprecia mucho; pero lo que sí es fuera de lo ordinario es la altura que alcanzan los médanos; parecen más bien lomas bastante escarpadas que médanos tradicionales - con alturas a veces de hasta 180 metros.

Ya desde lejos, cuando nos aproximábamos, nos dimos cuenta en seguida de la particularidad de génesis de esos médanos.

Como todos los médanos, éstos fueron formados y empujados por el viento; pero, en este caso, el viento dominante sopla en dirección a un bolsón formado por una sierra, por lo que, por una parte, los médanos ya no tienen a donde ir y, por otra parte, el viento, como tiene que cambiar de curso, de horizontal a inclinado, para pasar por encima de la sierra, tiende a darles a los médanos una forma empinada no tradicional.

Según aprendimos más tarde, cuando el viento invierte su dirección y viene de allende la sierra, empuja la cresta de los médanos en dirección contraria a su inclinación inicial, lo que crea una verdadera cuchilla a lo largo de la cresta de cada médano, lo que se pone en más evidencia con una apropiada iluminación.