que lo bombardean a uno con la hora exacta cada tres o cuatro minutos, en estas dos horas ninguna de la docena de radiodifusoras que se puede sintonizar mencionó la hora ni una sola vez; además, ahora se nos ocurre, aun de haber dado una de ellas la hora, no nos hubiera ayudado porque no se sabe de qué lugar emiten; se identifican solamente con sus respectivas siglas de cuatro letras - como todas las emisoras de este país tienen - sin mencionar de qué ciudad.

Hablando del nombre de las emisoras de este país, ninguna jamás se llamaría por el nombre de una ciudad, una región, un rasgo topográfico, un héroe nacional; nada de eso; todas las emisoras son catalogadas administrativamente por cuatro letras y nada más; un sistema muy creativo y agradable, no hay duda, y muy llamativo y fácil de recordar.

Además, la primera letra de todas las emisoras del este de Vespuccia es W; probablemente porque W es la inicial de la palabra west, que quiere decir oeste; y la primera letra de todas las emisoras del oeste de Vespuccia es siempre una K; quién sabe por qué. Así, por ejemplo, una estación del este es WBAI, y una, del oeste es KPFK. Muy pintoresco, muy interesante e informativo. Lo peor del caso es que aun en referencias diarias y locales a la denominación de las estaciones, nunca se omite, ni una sola vez, especificar la primera letra; así, nunca nadie hablaría, aun localmente - lo que quiere decir aun sabiendo de qué lado del país se trata - nadie hablaría de BAI o de PFK sino que siempre, religiosamente, cien veces, se le antepone la W o la K.

Y todas las demás emisoras - más de siete mil de ellas, creemos - por igual.

Volviendo a nuestra imposibilidad de identificar el origen de las estaciones de radio que sintonizamos y de enterarnos de la hora local por la radio, vamos a dormir. Mañana, nos levantaremos una hora más temprano, a las 5, por la duda, y ahora son las 23:30.

De todos modos, vamos a pasar la noche, y el día de mañana, en la franja sur del estado de Wyoming, que, en otros tiempos, también era bajo bandera mexicana y también fue víctima del segundo gran robo ya mencionado varias veces, junto con Alta California, Arizona, Nevada, Utah y parte de Colorado y de Nuevo México - otro pedacito de Wyoming, más al este de aquí, ya había sido robado juntamente con Texas, la otra parte de Colorado, la otra parte de Nuevo México y pedazos de Kansas y Oklahoma.

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Esta mañana, descubrimos que no teníamos por qué preocuparnos por la zona horaria; en Wyoming, tienen la misma hora que teníamos en Utah.