kilómetros; conversaciones son factibles después de un poco de práctica; con la repetición, de vez en cuando, de una palabra o de una locución; al principio, la articulación parece ser confusa pero, después de algunas pocas tentativas, el oído se acostumbra; teléfonos tienen que encontrarse en un lugar bien silencioso."
•ß Menos conocida - o desconocida por completo - es la multiplicidad de los otros intereses y estudios de Alexander Graham Bell, en varios grados de colaboración con asociados y asistentes.
» Los principios aerodinámicos del vuelo. Empezó con cometas y las construyó de tantas formas y de tantas estructuras que no hay palabra que pueda describir propiamente lo que se ve en las fotografías; solamente se puede mencionar que algunas construyó incluso en forma de aro, con aspecto similar a las rendiciones gráficas de las estaciones espaciales del futuro, y las construyó en combinaciones de tales aros aéreos, con aspecto similar a las rendiciones gráficas de las estaciones espaciales del futuro más lejano aún. Una de sus cometas midió treinta metros de largo. Algunas de sus cometas tenían bastante fuerza para llevar un hombre. A algunas de sus cometas hasta les agregó un motor de combustión interna, y un tal aparato levantó vuelo hasta la altitud de cincuenta metros y quedó en el aire varios minutos. Todo lo cual llevó a la construcción y al vuelo del primer avión en Canadá.
» Un detector de sonido subacuático.
» Un saco, una bolsa, al vacío, o sea lo que sería un antepasado del pulmón artificial neumático moderno.
» Un detector de metales - entiéndase de balas en el cuerpo humano.
» Sistemas de condensación de agua fresca, a partir de agua de mar, e inclusive de niebla o de humedad ambiente.
» Juguetes activados por aire comprimido.
» Hélices aéreas accionadas a mano para movilizar barquitos por propulsión de aire.
» Telefonía sin cables - ah pero no por las ondas llamadas hertzianas, domadas por Marconi - sino efectuando la transmisión de las ondas sonoras por medio de ondas luminosas, luminosas solares, naturalmente, un proceso que él llamaba el fotófono.
» Mejoramiento del fonógrafo de Edison, lo que resultó en un grafófono.
Un capítulo aparte se merecen sus estudios, siempre en asociación con otros, de mejoras al sistema de alíscafo, de tal manera que llegaron a construir uno de 4,5 toneladas, que alcanzó, en 1919, la enorme velocidad de 113 kilómetros por hora.
Alexander Graham Bell también se interesó a ... la cría y mejoría de ovejas; pero el anagrama (incompleto) de su nombre, H. A. Largelamb, o sea Corderogrande, no lo utilizó para sus actividades pecuarias sino como nombre de pluma para sus artículos de ciencia popular.