fondo; que, entonces, el petróleo almacenado en su depósito habitual subterráneo, pero también pues, alguna vez submarino, migró por capilaridad hacia arriba dentro de las arenas del ex-fondo de mar, reemplazando poco a poco la humedad evaporándose de las arenas; y que, al ir aproximándose el petróleo a la superficie, progresivamente perdió, él también por evaporación, sus hidrocarburos más livianos, quedando en las arenas solamente los hidrocarburos más pesados en la forma del bitumen que hoy existe.
• Naturalmente, otras evoluciones geológicas posteriores habrían de cubrir dichos grandes depósitos de arenas bituminosas con nuevas capas sedimentarias, dando finalmente asidero a vegetación, presentando el aspecto geológico y visual que hoy se conoce.
♦ Otro aspecto de interés es que el aprovechamiento de estos depósitos que hoy se lleva a cabo no es el resultado de un descubrimiento moderno instantáneo de los depósitos, y de la manera de explotarlos.
» Ya los paraborígenes conocían propiedades de la exudación de estas arenas, y >>utilizaban el betún para impermeabilizar sus canoas;
» ya a fines del siglo XIX, los Blancos habían perforado pozos en la creencia, >>errónea, de que tenía que haber también depósitos de petróleo líquido en >>conjunto con el betún;
» ya en 1920, se trataba de darle a la arena bituminosa usos como material de >>pavimentación o material de techado;
» fue recién en 1930 que un investigador científico encontró la manera de >>extraer el betún de las arenas;
» y fue recién en 1964 que una empresa se animó a poner en práctica industrial >>los resultados de laboratorio de aquel científico; fue una aventura >>tremenda, muchas veces a punto de fallar, pero hoy esta empresa tiene más de >>3.000 hectáreas de los depósitos arrendadas y está explotándolas.
Es esta empresa que visitamos ayer.
La secuencia de operaciones va como sigue.
⇒• Primero, hay que desmontar el tupido bosque que cubre la superficie. Ello se puede hacer solamente en invierno porque la capa superficial del terreno es un espesor de seis esponjosos metros de vegetación en descomposición, que sirve de suelo para los árboles, pero que, solamente cuando endurecido por congelamiento, aguanta maquinaria sin tragársela.
⇒• Luego, hay que cavar una red de acequias. Y así se quedan las cosas un mínimo de dos años para lograr un buen escurrimiento.
⇒• Recién luego puede empezar la etapa siguiente, que es la remoción de la capa de hasta seis metros de profundidad de vegetación en descomposición, el muskeg, seis metros de profundidad sobre centenares de hectáreas, un trabajo >>>>>>>>