1) no son los pobladores del villorrio que quieren que se establezca aquí la cuarta capital, por espíritu de progreso - al contrario, se oponen a tal idea porque les gusta lo chico, lo tranquilo y lo apartado - y es que

2) tampoco son los habitantes y burócratas de la presente capital quienes lo quieren porque, como es natural, prefieren quedarse donde ya están acostumbrados; sino que

3) los que propugnan esta mudanza de capital son mercaderes de tierras, magnates de construcciones y otros intereses similares, para quienes sería, naturalmente, la bonanza del siglo.

Acabamos de tener nuestro primer vistazo del cerro McKinley, que es el cerro más alto del norte de América. Efectivamente, así, desde lejos, desde muy lejos todavía, parece una masa muy imponente; no tanto por su altura como por su volumen. Su nombre en idioma tanana es Denali, o sea La Alta; y para los Rusos es la Bol'shaia Gora, o sea Cerro Grande. Vamos a ver cuando nos acerquemos más.

La carretera se puso más linda; o por lo menos parece más linda porque desapareció el tráfico; y ahora se presenta casi como un paseo.

Nos acercamos bastante al cerro McKinley, quizás lo más que se pueda sin perder la noción del conjunto; y aun con sus impresivas estadísticas, esta gora, por más bol'shaia y denali que sea, no logra moverlo demasiado a uno.

Pero no todo lo tiene perdido. Es cierto, el McKinley no impresiona a todo el mundo; no es, con sus aproximados 6.000 metros, el cerro de mayor altitud de América porque lo es el Aconcagua, con sus aproximados 7.000 metros; pero es el cerro de mayor elevación, o de mayor estatura, no solamente de América sino de toda la Tierra. La pregunta, naturalmente, es: qué diferencia hay entre altitud y altura. Altitud: distancia vertical entre mar y cima. Elevación: distancia vertical entre base del cerro y cima. Y en este sentido, el McKinley, visto desde una cierta dirección, es el campeón mundial, con un desnivel, de base a cima, con una elevación, de alrededor de 5.900 metros, apenas menos que la altitud. Un caso especial, sin duda.

Nos encontramos un lugar para pernoctar no lejos del punto de observación, y probablemente pasaremos aquí todo el día de mañana, domingo, para llegar a Fairbanks el lunes, día hábil.

En el Denali State Park, Božka haciendo una cassette

Volviendo en pensamiento a la península de Kenai, se puede decir que nunca es menos de linda, muchas veces, hermosa, pero muy demasiado poblada para nuestro gusto.

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