Viajando hacia nuestra última visita de una planta fabril en Nueva Inglaterra, en el pueblo de Auburn.

Visitada la fábrica; y viajando hacia la frontera con la provincia de New Brunswick, en Canadá.

La fábrica produce laminados plásticos; básicamente láminas con dibujos imitando mármol, madera, y otros materiales.

Lo más curioso de todo el proceso de laminados plásticos es que todo empieza siempre con una hoja de ... papel.

1)  Por una parte, se toma una hoja de papel con el dibujo que se le quiere dar al producto final, y este papel se pasa por un baño de resinas artificiales.

2) Por otra parte, se prepara hojas de papel kraft, y también se las impregna con resinas artificiales.

3) Luego, se encima: tantas capas de papel kraft, ya plastificado, como sea necesario para formar un soporte adecuado al propósito de la lámina final, y una hoja del papel con el dibujo, también ya plastificada.

4) Luego, contra la faz externa de la encimada, o sea de la hoja con el dibujo, se agrega una hoja de un papel especial, también impregnado de plástico; este papel especial, luego, se derretirá por completo dejando solamente su plástico como capa externa por encima del dibujo.

5) Finalmente, todas las capas así encimadas se ponen en una prensa caliente por un tiempo en función del resultado final que se quiere lograr.

6) Y el producto final es una lámina que puede variar en espesor desde el espesor de una hoja de papel, y que podría servir quizás para cubrir paredes, hasta un espesor bastante grueso que serviría para mesadas.

Mientras estábamos viajando, y grabando lo que antecede, anocheció, y hay llovizna, y a veces hay neblina, pero hemos decidido seguir viajando un rato más porque, con todas las actividades desde Nueva York, nos atrasamos en nuestra ración diaria de kilómetros que tenemos que cubrir si queremos llegar al océano Artico en invierno; además, a medida que nos vamos a ir adentrando en la mezcla de norte-e-invierno, los días se van a volver cada vez más cortos y habrá, eventualmente, que viajar, aunque sea en parte, en la oscuridad.

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Hoy, nos levantamos a las cinco, antes de que amanezca, que es la hora habitual cuando nos levantamos todos los días; pero salimos recién más tarde, por algunos, ya impostergables, quehaceres en nuestro vehículo.