Pero donde duele es desde la primera U en adelante, en particular en la primera U. ¿Por qué "lu..." en vez del original "lo..." en Colón o aun en el ficticio Colombo, cuando sería tan fácil escribir Kolón o Kolombo?
Por la misma razón por qué encontramos, en fuentes anglas sobre la arqueología del Perú, y en fuentes no-anglas copiando las fuentes anglas, la frecuente desfiguración de la forma original Tahuantinsuyo, con O final, en Tahuantinsuyu, con U final; y encontramos frecuentes otros casos de topónimos y nombres no-anglos desfigurados en contextos anglos, y luego tomados y copiados por eruditos no-anglos - de intelecto quizás erudito pero de mentalidad ciertamente ovina - en la versión torcida angla como si fuese la versión original y legítima. Una plaga traicionera.
Nosotros mismos, durante mucho tiempo, anduvimos enloquecidos por esta resquebrada, desdoblada, personalidad gráfica. ¿Cuál era la correcta? Hasta que, oliscando como siempre oliscamos, dimos con un documento colonial original con la forma original
T A V A N T I N S V I O
más exactamente T A V A И T I И S V I O con las N invertidas
pero, de todos modos, con una O final y no una U.
Así que, si los Anglos necesitan escribir una U para pronunciar una O, que se inventen su propio sistema gráfico; y mientras tanto, que los eruditos de los demás idiomas sean un poco menos eruditos, un poco más avivados, que no caigan en la trampa de sumisamente aceptar las desfiguraciones que un idioma nebuloso (el inglés) inflige a un sistema gráfico cristalino (el latino), y que no caigan, por colmo, en la trampa de ver estas desfiguraciones no como desfiguraciones sino como imponentes destellos de superioridad, y de sentir su adopción por idiomas no-anglos como enaltecedora participación en lo que se cree una superioridad.
Así como el inglés no puede, en la palabra Tahuantinsuyo, escribir "suyo" y pronunciar "suyo", así, en el caso de Colón/Colombo, el inglés no puede escribir "Colo..." y pronunciar "Colo..."; para pronunciar "Colo..." tiene que escribir "Colu..." Pero, ¿por qué tendrían los demás idiomas que dejarse enloquecer?
El drama es, por una parte, que el idioma checo, cayendo, como ocurre, en la trampa de ortografía desfigurada por necesidades anglas y tomando esta ortografía literalmente, escribe y pronuncia "Kolu..." en vez del correcto "Kolo..." en contra de todo antecedente histórico, y de sus propias necesidades fonéticas.
Y el drama es, por otra parte, que el idioma checo - por lo menos lógico, hay que reconocer, con su propia abdicación de su propia integridad - extiende la aberración angla hasta donde ni los Anglos la extienden, y escribe el país sudamericano Kolumbia, con "lu" en vez del "lo" correcto, mientras los Anglos >>>>>>>>