Nos preguntamos cómo era la situación geológica
> hace más de 3.000 años, cuando los Canaánitas de Tiro - otra gente disfrazada >>por extranjeros con un nombre que no le es propio, en este caso por los >>Griegos en Fenicios - fundaron la ciudad, alrededor de 1100 a.C.;
> y luego, cuando sus primos, los Cartaginenses, la ocuparon, en 501 ó 505 >>a.C.;
> cuando los Romanos la ocuparon, en 201 a.C.;
> incluso cuando Cristóbal Colón empezó aquí su segundo viaje, el 25 de >>septiembre de 1493; porque bien sabemos, por lo que vimos en Palos, cuán >>drásticamente puede cambiar la delimitación entre agua y tierra en tan sólo >>500 años.

Ahora, que no podemos no hacernos una pregunta y no quedarnos con una duda.

Por una parte, considerando las larguísimas tierras anegadizas que separan el sitio de Cádiz de tierra firme, trecho que, hoy, se recorre con sólo algo de paciencia por una cómoda calzada sobreelevada pero que, en tiempos de Colón, debió de ser un largo, enojoso, cansador, obstáculo; y por otra parte, viendo, por un estudio de un mapa, que, del otro lado de la bahía llamada de Cádiz, hay puertos como Puerto de Santa María y Puerto Real, bien en tierra firme, y mucho más accesibles desde centros de abastecimiento; la pregunta y la duda son si el segundo viaje de Colón, especialmente tomando en cuenta su envergadura y por ende la envergadura de los preparativos, se inició en Cádiz o en la bahía de Cádiz, o sea, en la práctica, en uno de los dos puertos sobre la bahía de Cádiz cómodamente en tierra firme. No sabemos, pero sería tanto más lógico.

Una cosa cierta es que posteriormente - en la expansión de los interminables descubrimientos, invasiones y explotaciones desatados por Colón en Guanahaní - justamente este Puerto de Santa María conoció un gran auge económico como centro de cargadores a, y de, América. Incidentalmente, fue en Puerto de Santa María que Colón vivió dos de los años anteriores al viaje I, como huésped en el palacio del duque de Medinaceli - también vimos Medina Celli - hasta principios de 1486, cuando todavía no sabía si habría algún viaje, y aun menos algún viaje I.

»»»»» De todos modos, desde por aquí fue que Colón zarpó para su viaje II.

→→Fue en este viaje II, o, más exactamente, solamente en sus preparativos y su zarpada, que Cristóbal Colón tocó el pináculo de su gloria e importancia. Hay que imaginarse la solemnidad de su flota de 17 navíos sumando 14 carabelas y 3 carracas o sea naos, y llevando 1.500 hombres a bordo. Por primera vez en la historia de la humanidad y del planeta, iba a cruzar el Atlántico semejante muchedumbre náutica; aun tomando en cuenta a los viejos Vikingos y aun dando el beneficio de la duda a los antiguos Keltiberos.