Así termina la realidad y el mito de quien - según una docta enciclopedia de quince o veinte tomos quiere hacer creer a sus lectores - se llamaba, "en portugués, Magallanes".  ¿Sorprenderse? Por qué sorprenderse cuando, en la misma enciclopedia vespucciana, leímos, bien destacado, como leyenda de una fotografía, que a Tuktoyaktuk, en los Northwest Territories, se puede llegar solamente por aire o por mar. Y entonces, ¿cómo llegamos nosotros a Tuktoyaktuk manejando - si bien por el océano helado?

Post Scripta.

1) Parece que las utilidades de las especias traídas en el barco sobreviviente alcanzaron a cubrir el costo de la expedición y de los cuatro barcos perdidos.

2) Elcano salió una segunda vez para las Molucas; tres años más tarde, en julio de 1525; con 7 barcos y 450 hombres; pero no como comandante, como piloto; tuvo dificultad en re-encontrar el Estrecho.

Y murió antes de alcanzar las islas. Murió como comandante porque el comandante ya había muerto antes, y Elcano se había vuelto su sucesor designado por cédula real secreta contenida en sobre sellado a no abrir sino en caso de muerte del comandante original.

■♦■ Desde este Sanlúcar de Barrameda salieron muchos otros nombres hacia la Gran Aventura, desde ilustres hasta humildes.  Como muestrario:

→ Flotilla con refuerzos para Bartolomeo Colón en la Española.
→ 1499, Diego de Lepe, con dos naos.
→ 1500, El Comendador Alonso Vélez de Mendoza, con dos naos.
→ 1502, Nicolás de Ovando, nombrado para gobernar la Española, con una >>espléndida flota de 24 carabelas y 5 naos, y 2.500 personas - ya no se podía >>hablar simplemente de marineros.
→ 1514, Pedrarias Dávila, nombrado gobernador del Darién, con 25 barcos de >>varios tamaños, hacia su destino de cortarle la cabeza a Vazco Núñez de >>Balboa.
→ 1515, Juan Díaz de Solís, con tres carabelas, hacia su destino de participar, >>en el estuario del Paranaguazú, el hoy mal-llamado río de la Plata - nuestro >>estuario de la Plata - en un asado; si bien, lamentablemente, no como >>comensal sino como asado, unido así en un mismo destino con Verrazano y >>Valdivia, entre los célebres, y con muchos otros, entre los desconocidos.
→ El Adelantado Montejo, conquistador de Yucatán.
→ Hernán Cortés, hacia la aniquilación de Tenochtitlán.
→ Francisco Pizarro, del cual aprendimos mucho en el Darién y el Tahuantinsuyo.
→ Hernando de Soto, para el sudeste de Vespuccia.
→ Vásquez Coronado, para el sudoeste y centro de Vespuccia.
→ Francisco de Orellana, para el río de sus amazonas.
→ El segundo Almirante de la Mar Océana, Colón hijo, don Diego Colón.