Es de preguntarse si el rey portugués - con todo el deseo e interés que tenía de desviar a los Castellanos de la ruta marítima hacia Asia alrededor de Africa, que los Portugueses estaban buscando, y poco a poco descubriendo - no tomaba demasiados riesgos tratanto de mandarlos a Asia directamente por el Atlántico y, por colmo, dándoles ayuda técnica.
Pero es que Dom João II sabía de antemano que Zarco/Colón no podía llegar a Asia cruzando el Atlántico. Y cuando Zarco/Colón regresaría de su primer viaje, João II sabría que no había estado en Asia.
Por una parte, había una manera, a disposición de cualquier Europeo, de intuir la existencia de una barrera infranqueable entre Europa y Asia por el Atlántico, de una barrera como, según el nivel y tipo cultural, quizás un continente o quizás el abismo del fin del mundo u otra cosa: ¿cómo era posible que los Asiáticos, de los cuales los Europeos conocían la alta cultura, se empecinaban en comerciar con Europa por el largo, arduo, camino terrestre, y por el costoso intermedio de los Arabes, en vez de lanzarse en una "Cristobalada" al revés y cruzar el Atlántico hacia Europa, al poniente de Asia, navegando hacia el levante de Asia? De haber sido posible, seguramente lo hubiesen hecho.
Por otra parte, el rey Dom João II tenía, lo que ningún otro Europeo tenía, pruebas palpables de sólidas tierras, confirmando la intuición, gracias a las navegaciones de Portugueses como Diogo de Teiva en 1452 y 1472, Pedro Vaz da Cunha en 1488, y seguramente otros.
Suficientes garantías, a juicio de João II, de que los Castellanos nunca llegarían a Asia cruzando el Atlántico.
Incidentalmente, fueron precisamente estas informaciones cosmográficas mandadas por João II a Colón que más adelante, en ese primer viaje, salvaron la vida de Colón y de algunos de sus marineros - de una manera ciertamente no prevista por el astrónomo. Fue cuando unos indígenas amenazaban con matar a Colón y sus marineros, y Colón, para convencer a los indígenas de que tenía poderes sobrenaturales, les "profetizó", gracias a esas tablas que indicaban un eclipse de Luna, que él, Colón, dentro de tres días haría desaparecer la Luna.
Al respecto, el eclipse de Luna parece ser información ortodoxa. ¿Valida ello la información heterodoxa de Zarco y João II, ya que las dos informaciones están ligadas, o trátase solamente de una astuta maniobra de entretejer lo heterodoxo con lo ortodoxo para dar plausibilidad a lo heterodoxo?
Por otra parte, Zarco o no Zarco, parece imposible que Colón no hubiese podido - en los siete años que estuvo persiguiendo y esperando a los Reyes Católicos - conseguir financiación de otra fuente si así se hubiese empeñado.