con otros idiomas, como cualquier otro idioma. Por ejemplo, las exóticas palabras Gaztelu, Eliza, Zerbitzu, Bidea. Gaztelu es simplemente Castillo, Castle, Château; Eliza es, evidentemente para quien sabe, Iglesia, Eglise; Zerbitzu es Servicio, Service (en francés e inglés); Bidea se traduce por carretera, pero no es otra cosa que Vía, Voie, Way, Weg.

Cartel antes de Vitoria/Gasteiz

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Esta mañana, las iglesias-fortalezas se van sucediendo, siempre a la vista una de la siguiente, todavía ilustrando cómo formaban antaño una notable red de fortines y refugios fácilmente accesibles en tiempos de violencia.

Ah, ahí a la derecha, de absoluta sorpresa, una cámara megalítica; sí, una cámara megalítica ibérica.  A dar media vuelta para verla de cerca.

Sí, es una cámara megalítica según el más puro arquetipo megalítico, a la manera de la cámara de Krukuno: las paredes, de megalitos parados, y el techo, de un megalito horizontal, todos, perfectamente en bruto como la naturaleza los hizo.  Un cartel reza que fue fechada a 2200 a.C.

Desde el pueblo de Amurrio hacia el noroeste, estamos en vívida rememoración de los Andes colombianos, de su lado pacífico. La misma topografía severamente arrugada, con las consecuentes torceduras de la ruta; el mismo verdor en todas las laderas; claro, falta la escala de grandeza, y el verdor no proviene del mismo tipo de vegetación, y la mansedumbre de este asfalto nunca podrá evocar las asperezas de aquellos caminos - pero la analogía no está mal.

Y otra cosa hay, aquí, que no había en los Andes colombianos: ovejas. Estas ovejas en nada se parecen a las ovejas que vimos en Argentina o Inglaterra o Eria. Estas ovejas tienen aspecto de alta distinción, como miembros de una cofradía esperando una ceremonia, con sus mantas de lana impecablemente hasta la rodilla y sus cabezas negras contrastando con sus mantas. Sólo les falta una mantilla de encaje negro.

Los Andes-Colombianos-de-Iberia acaban de terminar, en Balmaceda, o Valmaceda, según mapa o según cartel.

Altamira.  Famosa Altamira de las pinturas rupestres.

Para visitarlas, espera de ... entre un año y un año y medio, previa solicitud por escrito.

Nosotros, si Dios quiere, vamos a entrar mañana. Admisión de sólo 10 a 40 personas por día, según la época del año, para combinar las condiciones >>>>>>>>