camino y las nacidas en destino,
          formarán una generación que se podría llamar       G-I
          Esta, ahí mismo se reproduce; y ahí mismo nace la  G-II
          Esta, ahí mismo se reproduce; y ahí mismo nace la  G-III
          Esta, ahí mismo se reproduce; y ahí mismo nace una G-IV
          Y podría haber una G-V.

Para entonces, se anunciará el otoño norteño. Y otra maravilla ocurrirá:
la G (IV o V), según a cuál le tocarán los presagios de otoño, dejará de ser sedentaria y reproductora como las generaciones anteriores, y se volverá generación migratoria para regresar a México.

El viaje le tomará unos 30 a 45 días, a razón de unas seis horas de vuelo diarias, a velocidades de entre 15 y 50 kilómetros por hora. Y las Plebeyas estarán de vuelta acá; si bien solamente como especie, ya que, evidentemente, ninguno de los individuos que vemos ahora acá, regresará.

El mismo tipo de migración sobre varias generaciones que postulan los proponentes de los Vikingos en el Perú como origen de la casta de los gobernantes incaicos, o en el Paraguay como origen de los "Indios blancos" que aun hoy allí sobreviven.

La pregunta es: ya que las plantas asclepias son de amplia distribución geográfica ¿por qué las Plebeyas vuelven siempre precisamente a este bosque? Y un misterio aun más agudo: ¿por qué se asientan siempre precisamente en los mismos árboles dentro de la extensión del bosque?

> De todos modos, ¡qué bonanza para un insectívoro famélico, tantos bocaditos acumulados en un mismo sitio!

Ah, pero no; la astucia de los insectos le gana al hambre de los insectívoros. Es donde se ve la importancia de las plantas asclepiadáceas. Son venenosas. Pero no para las orugas de las futuras Plebeyas. De manera que las orugas, y luego las mariposas también, son venenosas; además, de olor y sabor repelentes; una completa garantía contra insectívoros. Una garantía de protección tan eficaz que otras mariposas, que serían palatables pero se parecen a las Plebeyas, gozan, por analogía, de la misma protección contra insectívoros.

Otro punto de partida para un poco de filosofía casera. ¿Saben las Plebeyas qué hacen, o adquieren su defensa química por la casualidad de que las plantas que alimentan las orugas también las vuelven venenosas, malolientes y amargas? ¿Cómo sobreviven las especies de insectos que no tienen tal protección química? - ¿porque nunca se acumulan como las Plebeyas, y su diseminación es su protección como especie? Toda la cuestión entre la ciega casualidad y sus consecuencias y la sabia organización y sus consecuencias, en la vida de este planeta.

P.S. Este bosque y otros bosques cercanos son el invernadero principal de las Plebeyas.  Pero cierta cantidad, menor, migra entre la misma zona norteña y >>>>>>>>