⇔ Mitla es pues el centro de repliegue de los Zapotecas en decadencia, tratando de re-arraigarse después de haber sido expulsados de su capital nacional, Monte Albán, por sus vecinos occidentales, los Mixtecas.
Durante un tiempo, estuvieron exitosos, pero eventualmente fueron alcanzados otra vez por el expansionismo mixteca, por cuanto, los restos que se ve hoy en Mitla son mayormente zapotecas, pero con agregados mixtecas - si bien la proporción exacta de dicha mezcla parece ser cuestión de opinión personal: consultamos con tres arqueólogos haciendo trabajos de mantenimiento en las ruinas, y recibimos tres opiniones algo diferentes:
1) todo es zapoteca, salvo los dibujos a pincel fino, de los cuales, de todos >>>modos, casi nada queda;
2) los dibujos a pincel son mixtecas, pero también los mosaicos;
3) incluso algunas características de la estructura arquitectónica son mixtecas >>>agregadas a la zapoteca ...
⇔ La subyugación siguiente - de los Zapotecas y de los Mixtecas - fue por los Aztecas, si bien no dejó marcas hoy palpables.
⇔ Y la subyugación siguiente - de los Zapotecas, de los Mixtecas y de los Aztecas - fue por los Españoles, férrea, con el genocidio cultural conocido.
⇔⇔► Algunos de los edificios de Mitla no sólo estaban todavía en uso a la llegada de los Españoles, sino que continuaron en uso durante varias décadas posteriores.
Hoy, los vestigios incluyen, en teoría, lo siguiente: cinco núcleos, cada uno, un patio delimitado por habitaciones - bueno, perdón, cinco "palacios"; innumerables sitios de viviendas y de tumbas desparramados por la comarca; y, a unos kilómetros, una fortaleza - más bien una cresta estratégica reforzada por paredes y zanjas. Pero, en la práctica, los vestigios se reducen a sólo un núcleo-palacio, y a partes de dos más.
La característica más individualista de la arquitectura de Mitla es el revestimiento de los muros, por fuera y por dentro, con sucesiones de grandes panales de complicados mosaicos geométricos de recortes de piedras; piedras no pequeñas pero pequeñas en relación con las grandes superficies de los panales, piedras cortadas individualmente a su forma exacta, en cantidades de centenares de miles, y encastradas unas con las otras con tanta precisión que se mantienen mutuamente contra las paredes sin necesidad de argamasa. Hay unos quince motivos - y muy diferentes entre sí, hay que destacar; cada panal estando formado por la repetición ad infinitum de un solo motivo a todo lo ancho o largo de un edificio si necesario.
Fachada del Palacio de las Columnas
En realidad, es algo parecido, en la técnica del mosaico por piedras pre-contorneadas - ciertamente no en los motivos, aquí, mucho más ricos - a los grandes frisos uxmaleños.
Sí, recuerda Uxmal