Nota. En este Templo - otra vez, más bien oratorio - felizmente todavía sobrevive un panel de los murales.
Tulum, los murales
Finalmente, el tránsito de Tulum de su vida maya-tolteca a su inmortalidad arqueológica no fue sereno, no ocurrió misteriosamente en un capullo de selva.
*> Aquí mismo, entre estos tres muros, para arriba, y el acantilado, para abajo, después de la invasión europea, los nativos, indómitos aun cuando despojados de sus tierras, se resguardaban de las crueles represalias de los Españoles por sus rebeldías; guardando, además, un ojo sobre el mar contra los asaltos de los piratas, ingleses, franceses, holandeses.
*> Aquí mismo, donde, hoy, centenares de veraneantes se pisan mutuamente los pies - no por volición realmente propia sino por dictados de la alta estrategia turística, en 1895, un arqueólogo-investigador ni acercarse pudo, por estar ocupado Tulum por paraborígenes libres.
*> Aquí mismo, incluso a principios de este siglo XX, tropas mexicanas asaltaban, en este recinto de Tulum, a paraborígenes que querían seguir libres.
Así fue nuestra visita a este Sitio Fortificado, que es el significado de Tulum, una denominación ni siquiera original sino acuñada en tiempos modernos; como tantas otras.
Sitio del tardío pos-Clásico - siglo XIII en adelante.
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Hoy, tareas varias.
Hoy, también tercer día (que sepamos - puede haber habido muchos más) de una increíble incuria por parte del Estado en directo perjuicio financiero de sí mismo, cuando tanta necesidad de dinero tiene para mil cosas, incluyendo el pago sin excesiva morosidad de los sueldos de los empleados en este sitio, según reza un gran cartel de reclamo cerca de la boletería.
¿Cuántos centenares, o miles, de turistas visitaron el sitio sin pagar la entrada de ley - no por alguna maniobra tortuosa sino porque les rechazan su dinero en la boletería porque alguien en la administración estatal no se ocupó de mantener una provisión suficiente de boletos? Sí, en la taquilla, hace días que el estado no cobra lo que le corresponde y que tanto necesita, por la idiota falta de recibos. Podría entenderse una hora, un día; varios días, es increíble; pero abrumador es que no es éste el único caso que vemos; ya vimos otros así. Abrumador.