♦♦ Velas por moldeo unitario (aquellas de cilindro esculpido, y aquellas de >>>escultura pura).
La cosa funciona como una fotografía. Hace falta el objeto para fotografiar o sea el motivo que servirá de decoración de la vela; obtener un negativo; y hacer positivos (o sea copias) con el negativo.
… Se elije el objeto que se quiere fotografiar - perdón, reproducir en parafina con función de vela. Puede ser una representación, en madera, metal, cerámica, de cualquier cosa: ganso, liebre, sombrero, árbol de navidad, muñecos infantiles, bajorrelieves, cualquier estatuilla, no importa su complejidad.
… Se hace el negativo, o sea, se saca un molde, colocando el objeto en un recipiente y virtiendo alrededor un producto, como ser silicón, que se solidificará sin volverse rígido por completo; lo que será el negativo del objeto a reproducir.
… Se extrae el objeto copiado del molde-negativo; se coloca en el centro vertical del negativo vacío un alambre para poder, luego, pasar la mecha; se vierte la parafina; se espera de dos a cuatro horas, que se solidifique la vela, según el volumen.
… Se saca la vela del molde y se la acaricia con una leve llama por todos los lados para derretir diminutas rebarbas, sin incidir, naturalmente, en la pieza misma.
Una de tales velas
… Llega el momento - con los adornos que así lo requieran - de pintarlos, salpicarlos, acaso completarlos con agregados de parafina de otro color, etc.
Pero, nos asombramos, ¿quién jamás podría tener el corazón de prender y ver derretirse semejantes obritas de arte, tanto cilindros de bajorrelieves como puras esculturas?
… En cuanto a las velas-puras-esculturas, nadie; son velas, técnicamente, pero son bibelós para deleitar la vista y dar un tema para conversar.
… Los cilindros de bajorrelieves, la gente sí los prende ... pero no los derrite; resulta, aprendimos con sorpresa, que las velas cilíndricas decoradas se componen, por una parte, de un centro, con un tipo de parafina, y, por otra parte, de una camisa, llevando los bajorrelieves, con otro tipo de parafina; de manera que la parafina interna, más pura, de punto de fusión más bajo, se derrite y quema, mientras que la parafina externa, con una mayor proporción de ácido esteárico, de punto de fusión más alto, aguanta el calor sin derretirse (mayormente, la primera vez) de manera que se puede colocar, luego, una vela común en la camisa y empezar nuevamente - "hasta cierto punto", nos acotó pícaramente el dueño de la fábrica, "porque demasiado aguante sería mal negocio".