Leímos en no otra fuente que un libro escolar vespucciano que, en las grandes pampas mediterráneas (Great Plains), fueron necesarias décadas, de "largo, duro, brutal, costoso, guerrear", y de "promesas violadas", ante la "notable resistencia de los Indios".
En cuanto a los medios expedientes en el asalto global de los Vespuccianos a los paraborígenes, se podría hacer una lista del arsenal para subyugar, y luego mantener subyugados, paraborígenes alguna vez libres y orgullosos:
→ imponer exigencias que no acatarán;
→ matar algunos, niños incluidos;
→ expulsarlos de sus tierras, por fuerza, por inanición;
→ arrearlos a sitios sin potencial de prosperidad;
→ matar sus creencias, su ética y sus costumbres;
→ matar su cultura, arrancando los niños a sus padres, mandándolos por fuerza >>a escuelas blancas donde los niños tienen prohibido hablar su propio idioma, >>no pueden tener contacto con sus familias y así olvidan su idioma y no >>pueden aprender su cultura;
→ ciertos días, sorpresivamente, y cuando expediente, considerarlos como bajo >>tutela;
→ ciertos días, sorpresivamente, y cuando expediente, considerarlos como >>potencia extranjera;
→ llamarlos a plebiscito, y después del cierre, sin preaviso, computar todas >>las abstenciones como "síes";
→ usar firmas y documentos falsificados como cosa normal;
→ rehusar la ejecución coactiva de los fallos judiciales a favor de los >>indios;
→ legalizar y validar violaciones legales en detrimento de los indios.
En cuanto a las promesas violadas, por el año 1868, los Blancos ya habían firmado casi 400 tratados ... y violado casi cada uno de ellos; y ello por una sola razón: codicia.
Dijo el presidente vespucciano Hayes: "Muchas, si no la mayoría, de nuestras guerras indias tienen su origen en promesas violadas y en injusticias por parte nuestra".
Pero más vale tratados violados que ningún tratado: ya hace décadas que más y más grupos paraborígenes recurren a tribunales para recuperar las tierras que perdieron por la violación de un tratado, y para procurar otras compensaciones.
Más ampliamente, con renovados, orgullo en glorias del pasado, e interés en los días de antaño, los paraborígenes
▪exigen el reconocimiento de su soberanía internacional;
▪incrementan su educación media: de unos 7.000 en 1969 a unos 40.000 en 1979;
▪como resultado, suben cada vez más;
▪utilizan dinero recibido en litigios por los tratados violados como capital >>>>>>>>