encontramos, hubo cuatro Negros en la expedición de De Soto; y fueron los primeros Negros en pisar estas tierras donde tantos millones sufrirían más tarde.
¬España, excluida de Africa por la división papal, no tenía acceso directo a la fuente de esclavos y tenía que comprarlos por intermediarios.
¬Es difícil estimar cuántos Africanos fueron arrancados de su continente, pero como idea general se habla de unos doce millones; y se calcula que unos 10/oo morían en la travesía; más de un millón de Africanos tirados a los tiburones.
¬Ya en el Africa pre-europea, había allí esclavos negros, propiedad de dueños negros; esos esclavos eran trocados a Europa por mercancías a través de intermediarios árabes; trocados como animales, sin consideración por lazos de familia, así como iba a ser luego, hasta en el siglo XIX, en Vespuccia.
¬Así que, cuando los Portugueses lograron alcanzar la parte negra de Africa, la única diferencia fue que empezaron a comprar los esclavos negros directamente de sus dueños negros sin pasar por los intermediarios árabes.
¬No todos los Negros eran traídos como esclavos de Africa. Algunos vinieron libremente como trabajadores endeudados y, después de cumplir con su compromiso, se volvían libres. Naturalmente, más de una vez, los dueños, recurriendo a alguna trampa legal, se los guardaban como esclavos puros y simples sin esperanza.
¬Había pues, de todos modos, Negros libres en Vespuccia.
¬Incluso había dueños negros de esclavos negros en Vespuccia.
¬En contraste con los esclavos en América ibérica, quienes tenían derechos, de educación, de propiedad, de entablar juicio, de ser testigos, de casarse, incluso de comprar su libertad en pagos parciales, los esclavos vespuccianos no tenían ninguno de estos derechos y ningún otro.
¬Ser esclavo estable no era lo peor; ser vendido era mucho peor, porque era sin consideración por lazos familiares, la madre se vendía por un lado, el padre por el otro, cada hijo, por donde se podía, como animales.
¬Se procreaba esclavos como animales con las mujeres, casadas o no, y la prole se vendía como animales. Valía dinero del momento mismo en que empezaba a respirar.
Todo ello, originando, por alguna extraña circunstancia, justamente en aquella Africa negra,
>que parece haber sido la cuna - o una de las cunas - de la humanidad,