1700.
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• Otra vez, Ocmulgee, poblado; para comerciar con los Ingleses; si bien guardando las viejas costumbres. Son los paraborígenes Muskhogee - probablemente Maskhogui - más conocidos como Creeks.

1773.
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• Todo el mundo, otra vez evaporado.  Definitivamente.

P.S. No un solo grano de tierra queda en su sitio original, por los ocho años >>>>>de excavaciones, las toneladas de tierra movidas, sin contar el >>>>>ferrocarril que, desde los años 1870, corta el sitio en dos.

En el museo, una pieza, o mejor dicho dos piezas idénticas, pidieron más de nuestra credulidad de lo que nuestra credulidad estaba dispuesta a conceder: el rótulo decía "Disco representando el Sol"; nuestros ojos veían dos óvalos, un poco más achatados en una punta que en la otra, con estrías, no del centro hacia la periferia sino longitudinales, como plumas de alas; totalmente idénticas a las sorprendentes alas desplegadas de las esculturas de pájaros del museo de Gainesville.

Hablamos con el encargado del museo para decirle cómo alguien se atrevía a denominar "discos" lo que cualquiera veía como óvalos, y a hablar de un símbolo solar cuando los supuestos rayos no iban del centro hacia la periferia. Se nos contestó que no había contestación, que muy obviamente no eran discos, no eran Soles, y que, por lo tanto, no había base para argumentar con lo obvio de nuestra observación.

Nosotros nunca sabremos cómo un erudito pudo concebir semejante desatino, pudo conseguir la bendición de sus pares, y cómo todos pudieron atreverse a hacer creer que un óvalo indudable es un círculo y que líneas transversales en abanico pueden simbolizar el Sol a gente todavía con su sentido común.

Para cuando, algún día, no queramos creer nuestra propia memoria, anotamos aquí un disco según el concepto de gente normal, empezando con escolares de primer grado, y un disco según el concepto vespucciano, incluyendo el Ministerio del Interior, del cual depende el Servicio de Parques Nacionales, del cual depende este sitio arqueológico.

Es doloroso, a más de increíble, que el excelente, respetable, esfuerzo de ilustrar las masas, en un ambiente físicamente ejemplar, incluyendo la arquitectura del propio edificio de acogida de los visitantes y la organización de todo el predio, sea mancillado por semejante incomprensible aberración conceptual.