weeks of space flight training", o mejor aún: "They are elegible/acceptable even with only a few weeks of spaceflight training". Pero no; demasiado claro para una mente angla.
Sideral.
♦♦♦ Y otra citación, negro sobre blanco, en el inglés original: "... such incredible density that ... it literally becomes a black hole in space." Sideral. Así que, según esos etéreos sesos, algo es tan denso que es un agujero, un hueco, un vacío, un nada. Noción más sideral que lo sideral de ese fantástico fenómeno invisible de ¡"densidad" "vacía"! del cual incidentalmente no se puede saber si es negro porque negro es visible, y preguntamos, cómo se sabe el color de algo invisible.
Tema que ya sufrimos, en aquel super-Radiotelescopio en Nuevo México - y curamos con nuestra noción de entidades traga-todo, o sea glotones, y aglutina-todo, o sea gluones, en resumen, gluotones. Quizás sea que esos sesos tienen tal densidad de inteligencia que son vacíos y no dejan escapar ninguna inteligencia.
♦♦♦ Otro tema. Confirmación del atroz inconceptualismo vespucciano hasta en las más altas esferas sufrido ya en el Jet Propulsion Laboratory. Nosotros siempre creímos que la Tierra tenía y tiene un satélite natural, a más de los satélites artificiales que ahora también tiene; y que el satélite natural se llama Luna. Y pensábamos que los demás planetas tienen sus propios satélites naturales, cada satélite, con su propio nombre.
Pero he aquí que no; que todos los satélites de todos los demás planetas robaron el nombre de nuestro satélite y todos son lunas, genéricas - dejando nuestro satélite sin nombre. A prueba, otra citación del original inglés, negro sobre blanco: "The four largest moons of Jupiter" en vez del racional, orgánico, lógico: "The four largest satellites of Jupiter" - y cada satélite con su nombre. Pero no. Sideral. Sideral.
Y ni queremos imaginarnos que esos sesos del firmamento científico hablan y escriben tan estúpido para que los entienda "el vulgo", lo que sería peor que sideral, sería lesa-humanidad.
♦♦♦ Finalmente ... pero no; basta.
Y lo peor de todo es que esa basura conceptual, en vez de quedar sellada en su idioma original, se propaga por todos los rincones del globo y contagia sesos que, por naturaleza, serían sanos.
Así fue nuestra visita al Cosmopuerto del Cabo Cañaveral, después de nuestra visita, hace tanto tiempo, tantos años ya, del Jet Propulsion Laboratory, en Alta California.
Una realidad incongrua - incongrua por lo menos según las maneras normales de pensar - es que las tierras y aguas del complejo espacial, no utilizadas directamente por las instalaciones, guardan su carácter de bañados y matorrales >>>>>>>>