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Todo listo. ¿Todo listo? ... No puede ser. Sí, todo listo. Sólo falta la inspección del vehículo. Mañana - todavía no lo po demos creer totalmente - a las 8, inspección y retiro del vehículo.

Ah, pero, no será así no más. Con un pie nuestro ya fuera de la oficina, alguien menciona a otro, como algo totalmente ajeno a nosotros, que para circular en la República Dominicana aun en nuestras condiciones, es necesario obtener ... placas dominicanas - las originales del coche no sirven.

- ¿Que qué? ¿Placas nuevas para una estadía de turismo, de seis días, ya que, > apenas salimos de este loquerío, damos media vuelta y reembarcamos el coche, >>o a lo sumo de trece días si perdemos el primer barco y tenemos que esperar >>el siguiente?
- Sí, hay que ir a Rentas Internas, a comprar un formulario y cinco sellos >>fiscales. [¡Por qué no nos lo dijeron cuando fuimos allá para los otros >>formularios!] Y correr - ¿a dónde? - otra vez a la Dirección General de >>Aduanas, por media ciudad naturalmente, a solicitar (y pagar, claro está) >>las placas. Parece que las entregan en el acto - lo que no podemos creer; no >>aquí, en Santo Domingo.

De todos modos, mañana, otros quince minutos de caminata, para comprar el formulario y los sellos; otros treinta minutos de taxi, para llegar a la Dirección General de Aduanas - allá, tiempo desconocido; y treinta minutos de taxi (y el gasto, claro está) para regresar al puerto. Y no se puede hacer este nuevo trámite de las placas dominicanas antes de sacar el vehículo de su contenedor, sólo después.

Uno de nosotros hará la diligencia, el otro montará guardia del vehículo. Por lo menos, se nos dice, la oficina de los sellos abre a las 7:30 - de manera que estaremos aquí a las 8 en punto, cuando abra la aduana.

¿Qué otras sorpresas nos esperan mañana?

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*

Jueves. Hoy, ¡ocho horas de agobiadora lucha! ¡Ininterrumpidas horas! ¿Tenemos nuestro vehículo?  Veamos.

A las 7:30 en punto, Rentas Internas. Cerrado. Ya hay pequeña fila. Abren recién a las 8. ¡A las 8! ¿Y el puerto, donde tendríamos que estar a las 8 para tener el mayor tiempo disponible? Mientras tanto, no podemos evitar oír la gente en la fila, hablando ¿no cierto?

"Le digo, aunque uno quiera cumplir con sus obligaciones impositivas, el pagar los impuestos es tan engorroso que uno prefiere volverse ciudadano delincuente".  Nos hace pensar en Bolivia.