Después de noche tranquila a la entrada de un parque provincial, viajando ahora hacia la frontera con Vespuccia; o sea hacia la ciudad de Windsor, de este lado de la frontera, y la ciudad de Detroit, del otro lado de la frontera.
El tiempo está muy agradable, soleado y tibio al sol, si bien bastante fresco en el fondo. No hay nieve, si bien el agua en las zanjas y los charcos está helada.
Corto es el camino que recorrimos, y ya tuvimos la oportunidad inesperada de visitar un criadero de zorros, que apunta a volverse, algún día, también criadero de linces.
Este criadero consta de dos tipos de habitáculos para los animales. Por una parte, dos galpones muy largos, divididos en jaulas individuales; y por otra parte, una gran cantidad de cuchas individuales, cada una, con su patiecito alambrado. Los galpones sirven para guardar los cachorros mientras crecen para protegerlos de la luz directa del Sol, que les arruinaría el color de la piel - si bien, en la próxima muda, la piel podría recobrar su calidad deseada. Las cuchas al aire libre sirven para los animales ya crecidos, y también para los servicios.
Por coincidencia, ahora justamente es la época del año cuando ocurren los servicios - por lo que no hay que perder esta única oportunidad anual. Hasta tienen, en el medio del criadero, una torre de observación desde la cual un observador se fija que los zorros hagan su cometido con las zorras. La duración de la época anual de servicios es de tan sólo cuatro días.
Los cachorros, resultado de los servicios que se hacen ahora, nacerán en la primavera, en abril. Zorros tienen una evolución muy rápida. Los cachorros nacidos en abril estarán listos para la matanza ya en diciembre del mismo año; y aquellos que se dejará para continuar el plantel estarán en servicio en el mes de enero, bien antes de cumplir un año de vida.
Los zorros tienen dos mudas por año, en la primavera y en el otoño.
La hermosa piel, de fondo negro, con las puntas del pelo plateadas, que pudimos admirar, es el resultado de mutaciones genéticas producidas por los criadores. El color natural de los zorros es más bien rojizo, según nos informó nuestro acompañante. El tipo de piel de los zorros que vimos es el producto y la propiedad de este criadero. Otros criaderos tendrán otros tipos de piel.
También nos habló el dueño de sus esperanzas y de sus ensayos. Este año, es la primera vez que va a tratar de utilizar para las zorras la modalidad de servicio ya común en otras especies, o sea la inseminación artificial; y, por gran casualidad, hoy mismo es el día de la primera inseminación artificial. Otra esperanza que tiene el dueño, es poder empezar la cría de linces. Nos mostró los cuatro ejemplares que tiene ahora y con los cuales va a tratar de >>>>>>>>