avión y sin límite para su utilización. Empezará a regir cuando lleguemos, cuando sea.
- Venga pasado mañana.
- No, pasado mañana, entregamos el vehículo.
- Venga mañana.

▪ Agencia de viajes.
Reservar pasajes a Santo Domingo. Lista de espera solamente; pero, aquí, listas de espera no se manejan por cronología sino por arreglitos, algo que ya favoreció a Karel en São Paulo. Gracias a la buena voluntad del agente y a sus conexiones, después de dos horas de suspenso, reservas confirmadas.

▪▪ Miércoles, 7.

▪ En la oficina del agente naviero/aduanal número II; ocho en punto, con documentos, con la esperanzada expectativa de, por fin, preparar el papelerío para que, hoy mismo, ellos hagan los trámites.
- Ah, pero aquí no se hace, se hace en nuestra oficina del puerto, a 32 >>kilómetros de aquí.
- ¡¿Y entonces, por qué nos hizo venir aquí?!
- No, aquí no es; hay que bajar al puerto.

¡Hay que imaginarse el vacío>producido en el estómago! El llama por teléfono a la oficina del puerto para anunciar nuestra llegada, y explica que queremos hacer trámites hoy para entregar el coche mañana. Del otro lado del teléfono viene la voz:
- No, imposible, este trámite lleva dos días y con suerte.
- Pero ¿cómo que es imposible hacerlo en un día, si queremos entregar el coche >>mañana y tenemos boletos de avión para pasado mañana. Además, pensábamos que >>el trámite, en cuanto a nosotros concierne, se haría aquí, de manera que, >>hoy, tendríamos tiempo todavía para otras diligencias como ir a dos >>consulados. ¿Por qué no lo dijo eso ayer?

Esta sorpresa nos hace perder el>barco del 10, y el vuelo del avión. Qué barbaridad. Habrá que tomar el barco del 26. Esta nueva coyuntura, por lo menos, nos devuelve al plan original de>visitar Guyana y Surinam desde aquí. Mañana mismo, iremos al puerto pues para ya adelantar la cosa con mucha antelación para entregar el coche el 14,>y volar el 16.

▪ Agencia de viajes.
Cancelar reserva a Santo Domingo; hacer reserva a Guyana para el viernes 16; de Surinam, todavía no se habla, esperando la visa (que, ahora, tendremos más tiempo para recibir).

▪ Consulado de Guyana.
Obtenida la visa prometida; no sin, antes, esperar quince minutos porque ni sabían dónde tenían los formularios (muchos solicitantes no debe de haber), y no sin, antes, llenarlos - sus 25 preguntas, muchas, con sub-preguntas, sobre cuatro páginas, todo en dos ejemplares originales, porque copiadora o siquiera papel carbónico en el consulado no hay.