En cuanto a la grandiosidad en abanico de todo el sistema, es menester tener presente, que más de 1.000 tributarios y subtributarios mayores contribuyen para crearlo y mantenerlo; que, de los 30 ríos más grandes de la Tierra, 10 son tributarios del complejo amazónico. Por ejemplo, el río Madeira, que cruzamos en Porto Velho, mide unos 3.200 kilómetros; el río Purus mide unos 3.000 kilómetros; el río Negro, que aquí mismo vemos contribuir sus aguas, mide unos 2.250 kilómetros.

Hay todavía muchos subtributarios y subsubtributarios sin explorar.

Entre el Amazonas propio y los principales tributarios, parece que hay unos 50.000 kilómetros navegables; habría que ver qué quiere decir navegable, pero, de todos modos, es impresionante.

Lo cierto es que barcos de altamar llegan tranquilamente desde el Atlántico a Iquitos, ya mucho más cerca del Pacífico que del Atlántico, bien dentro de Perú.

En la frontera Perú/Brasil, lo extraordinario es que la altitud del agua, bajada de los 4.800 metros iniciales, y todavía a una distancia de 3.400/3.500 kilómetros del mar, es de sólo ... unos 60/80 metros. Hay que imaginarse un desnivel de sólo 60/80 metros para fluir todavía unos 3.400/3.500 kilómetros.

En el mismo punto, la frontera Perú/Brasil, el ancho del Amazonas propio es de unos tres kilómetros, y la profundidad, de unos veinte metros.

Un ancho y una profundidad nada extraordinarios dentro del sistema. En el segmento Marañón, o sea del lado peruano de la frontera; en el segmento Solimões, o sea del lado brasileño de la frontera hasta la confluencia con el río Negro, donde estamos; en el río Negro propio; y en otros lugares; el ancho del agua es tal que, en un mapa que tenemos, con la escala de 1:5.000.000, o sea 50 kilómetros de terreno por un centímetro de mapa, el ancho no está indicado simbólicamente con una línea simple como en sistemas fluviales normales, sino con riberas individuales tan apartadas que el cartógrafo pudo indicar las principales de las islas en el medio del agua, y pudo indicar las principales contorsiones de cada ribera por separado, con la consecuencia de un ancho variando de simple a doble o triple indicado en el mapa.  Pasmoso.

Estos anchos básicos, cartográficos, se extienden, en época de lluvia, por tierras anegadizas de hasta 50/60 kilómetros de ancho.

En cuanto a la profundidad, llega, en lugares, hasta varias veces los veinte metros de la frontera.

El color oscuro del río Negro, y de todos los ríos tributarios que vienen del norte, se debe a que las aguas contienen una solución de materias vegetales en >>>>>>>>