≈ La Municipalidad de San Julián de inmediato declaró el sitio de interés municipal, pero nunca ayudó en nada en los trabajos necesarios, y que son de consideración ya que el casco del navío enigmático se encuentra sepultado en el lodo de la bahía - quizás felizmente así, porque, mientras tanto, no se destruye.
≈ Al contrario, cuando el hombre donó unas de las piezas rescatadas a la Municipalidad para el museo local, éstas prontamente desaparecieron, y nadie supo más nada de ellas, salvo que una de ellas - según nos dijo, por otra parte, una empleada de la misma Municipalidad - fue a parar a Río Gallegos por "razones políticas".
≈ El hombre, nuestro informante, en su afán de hacer algo, mandó una pieza de la madera a un laboratorio de Vespuccia para un análisis por carbono 14; cuando recibió el presupuesto por la operación, pidió ayuda financiera a la Municipalidad ya que él no lo podía enfrentar, y ni siquiera recibió contestación, ni siquiera negativa.
≈ Hablando de contestaciones, se quejó amargamente nuestro informante de que, cuando escribe a alguien en el extranjero respecto al caso, como lo hizo varias veces, recibe, por lo menos, una contestación cortés, mientras que, cuando escribe a alguien dentro de la Argentina, ni siquiera acuse de recibo le mandan.
≈ También, una vez, había logrado conseguir la cooperación de una empresa especializada en exhumar naufragios viejos con bombas de succión, y dicha empresa estaba dispuesta a hacer este trabajo aquí sin cargo, conque se le permitiera utilizar el trabajo como propaganda para sus equipos. Cuando hubo un cambio de intendente municipal por fiat del gobierno militar, este nuevo intendente prohibió cualquier tal operación de rescate.
Así tiene su vida amargada alguien que quería hacer algo constructivo.
Por lo menos, como magro consuelo, de vez en cuando recibe la visita de gente interesante. Por ejemplo, una vez, lo visitó un matrimonio que estaba siguiendo los pasos, paso a paso, de Magallanes; y otra vez, un matrimonio que seguía los pasos, paso a paso, de Drake.
El hombre amargado nos regaló, y tenemos como preciada pertenencia, un pedazo - naturalmente que de tamaño acorde con las posibilidades de almacenamiento de nuestro vehículo - de un madero del navío, misterioso pero de cualquier manera respetablemente histórico.
Ahora, hacia nuestra próxima meta, el otro "Bosque Petrificado" "más grande de la Tierra".
Y el viento. El viento se está volviendo una pesadilla. Recién, en San Julián, en ciertos lugares, no se podía dar un paso porque no se podía abrir los ojos, >>>>>>>>