Finalmente, tratando de localizar, o simplemente visualizar, la ubicación del asentamiento, no hay que olvidar que, muy posiblemente, la costa misma del agua habrá cambiado durante los siglos. Toda esta llanura es un puro campo de canto rodado, y, muy posiblemente, había el mar donde, ahora, quedan sólo las piedras.
De todos modos, que el villorrio haya estado un poquito más por aquí o un poquito más por allá, no cambia estrictamente nada a la profundidad de la trágica epopeya. Nos podemos imaginar el desamparo, la preocupación, las penurias, la depresión, de aquellos semi-náufragos en este ambiente de pura estepa, de mucho viento y de nada más, salvo un conejo como el que vimos, hace un rato, y los moluscos que seguramente debe de haber en el mar.
Pasando a una etapa posterior en las penas de Nombre de Jesús, es de preguntarse por qué, cuando parte de la gente se marchó a lo largo del Estrecho en busca de un lugar mejor, no se estableció a la distancia relativamente corta de aquí donde se encuentra el paso más angosto del Estrecho, por donde nosotros cruzamos la segunda vez - ya que el propósito era fortificar el Estrecho.
Pasando a otro drama por completo, estos sitios vecinos, punta Dungeness y cabo Vírgenes, también fueron testigos del paso de otra banda de hombres malhadados.
Esta otra historia de heroísmo en lucha contra un mal destino también tiene su origen en el ya mencionado paso del pirata Drake por estas aguas. Empezó más exactamente cuando el barco del pirata estaba siendo barrido por la tormenta, de vuelta del Pacífico al Atlántico por el sur de Tierra de los Fuegos; más exactamente, en un momento de calma relativa durante dicha tormenta - que tendría que haber sido una bienvenida pausa pero que fue sólo un maldito punto de partida para esta otra odisea.
Ocho hombres de la dotación de Drake que, durante la calma, habían debarcado con bote de remos en una de las islas australes de la conislación en busca de agua potable, tuvieron que ser abandonados a causa del reanudamiento repentino de la tormenta.
» Sin nada más que dicho barco de remos y sus cuchillos, sobre-vivieron dos >>semanas más de temporal.
» Remaron hasta esta entrada al Estrecho.
» Remaron hasta Santa Cruz.
» Remaron hasta San Julián.
» Remaron hasta el río de La Plata.
» Allí, los atacaron nativos, quienes hirieron a todos, y apresaron a cuatro.
■ Quedaron libres cuatro, y heridos.
» Remaron hasta una isla en la vecindad.
» Murieron dos, de las heridas.
■ Quedaron dos.