desarrollar su propio agarre, pero que luego se desintegrará para dejar la cría amarrada por cuenta propia, y en agua libre.

() Eventualmente, llega el punto del crecimiento cuando el peso de estos racimos se vuelve demasiado. Entonces, otra vez se recoge los moluscos, se los coloca en bandejas donde alcanzarán el tamaño para consumo.

Una segunda manera para lograr un aprovechamiento todavía más completo de una colonia natural de estos moluscos, es evitar las grandes pérdidas naturales de los huevos mismos, desde la ovulación misma, no abandonándolos a los peligros, prácticamente al puro azar, de las aguas. Para ello, se procura obtener la ovulación y fertilización de los huevos en el ambiente controlado de un laboratorio antes de pasar a la secuencia ya descrita. Justamente, durante nuestra visita salió del agua un buzo, trayendo ejemplares reproductores para tal fin.

Una tercera manera de lograr el mejoramiento de la mitilicultura es creando nuevas colonias, colonias artificiales; logrando tanta cantidad de huevos fertilizados y cría en laboratorio que haya sobrantes para implantarlos como nuevos campos de mitilicultura donde no los hay actualmente, en un lugar apto por las características del agua, como ser su salinidad, ambitura, movimiento y profundidad.

Almejas no tienen cabeza, lo que no les impide ser mañosas. Obvian su imposibilidad de moverse en busca de sustento, de una de dos maneras.

•) Una manera, la habitual, de obviar su sedentarismo, es atraer su comida hacia su boca - una boca interna, por colmo, ya que no tienen cabeza donde tener una boca - por un tubo aspirador de agua y de las micro-algas que el agua contiene.

••) Otra manera - característica de las almejas gigantes del océano Pacífico - de obviar su sedentarismo es aprovechar el sedentarismo, obligado por colmo, para dedicarse a agricultura, más específicamente a alguicultura: a lo largo de los rebordes de su concha (¡de alrededor de un metro de largo, hay que aclarar!) cultivan - o dejan crecer - algas microscópicas que les proveen una continua fuente de alimentación.

Durante nuestra visita, empezó lo habitual en Chiloé: la lluvia. Sigue lloviendo; está por anochecer; nos estacionamos frente a un alero natural en un barranco, para pernoctar.

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Llovió toda la noche; está lloviendo esta mañana.