tiempo para este mejoramiento cosmético y empeoramiento nutritivo; y se encontró la manera de lograr el mismo resultado mucho más rápido, y con un asalto adicional a la integridad de la harina: en el molino, someten la harina a un gas de cloro que, literalmente, la blanquea como se blanquea la ropa.
→→ Una posible manipulación, de la cual una harina-como-Dios-manda nunca soñó, es el agregado de bromato potásico.
→→ Otra posible manipulación, de la cual una harina-como-Dios-manda nunca soñó, es el agregado de fosfato de calcio.
/ Después de los agravios anteriores, cuando, del grano original, no queda en la harina mucho más que fécula, o sea almidón, cuando, según alguien se tomó el trabajo de calcular, la harina perdió por lo menos partes de 26 de los elementos nutritivos del grano, el molino se apiada de su víctima y le agrega tres vitaminas del complejo B, y hierro - si bien éste, lo agrega en forma de polvo impalpable que se podría recuperar de la harina con un imán y que uno no ve muy bien qué relación tiene con el hierro asimilable que la naturaleza nos da en muchas de sus plantas, como las de hojas verdes.
/ Con todo lo anterior, es curioso observar la coexistencia paralela bajo un mismo techo, de esta degradación por etapas del producto original y de un laboratorio de control analítico, donde se verifica a intervalos regulares el contenido de humedad, de proteínas, y de cenizas, de la harina; y donde también se hace pruebas de horneado para ver las reacciones de la harina ya en forma de masa.
/ Del momento cuando la harina se vuelve harina, su transporte de lugar en lugar, y finalmente a los camiones o los vagones que la llevarán al mercado, se efectúa por medio de tubos neumáticos.
►► / En este molino, si bien se ocupan primordialmente de harina, también venden trigo en forma de grano, pero aun más limpiado de cualquier impureza que podría aceptarse en la molienda pero sería inaceptable para la industria que produce "cereales" en copos para consumo como desayuno, y otros.
Pudimos ver este proceso de limpieza total y tuvimos que quedarnos asombrados. Se deja caer un continuo chorrito fino de granos de trigo delante de un ojo eléctrico; el ojo detecta al instante cualquier partícula que no tenga el color del trigo y, al instante, dispara un chorro de aire que intercepta la partícula extraña y la proyecta hacia un costado, a un recipiente para desechos; aun viendo el proceso con ojos propios es de no creerlo. Hasta aquí, lo que vimos en este molino.
►► Pero, gracias a la amabilidad y al interés de los dueños, pudimos aprender mucho más con referencia al trigo y a la harina.
No es que haya sido todo una total novedad para nosotros.