nuevo juego de cuatro cubiertas del tipo que necesitamos; o sea, otra importación por vía aérea del tipo que hicimos en Quito.
Por otra parte, la revelación de las fotografías todavía no la tocamos, y no estamos 100/oo seguros de qué hacer, porque también nos enteramos de que el laboratorio donde tendrán el papel que requerimos, no tiene guantes para manejar los negativos.
\ST/ Ante tales extensiones, parece oportuno poner al día las observaciones ya >>>>>acumuladas.
Volviendo otra vez a la radiodifusión, logramos arrancarnos a las delicias de las cuatro emisoras ya mencionadas, para cumplir con el deber de analizar debidamente todas las ondas radiofónicas.
Descubrimos que ciertas estaciones chilenas tienen la originalidad de basarse en tipos de gremios, como ser Radio Minería, Radio Agricultura, Radio Cooperativa; pero también tuvimos que constatar que todas estas estaciones, éstas y todas las demás adicionales, están sumergidas, sumidas, en la vaciedad y/o abrasividad vespuccianas.
En uno de los recorridos del abanico de las ondas radiofónicas, nos pareció estar en Vespuccia: de once estaciones difundiendo las así-llamadas canciones modernas con que tropezamos, diez eran en puro inglés, una sola en castellano.
En otra oportunidad, otro día, otra hora del día, nos encontramos con nueve emisoras difundiendo concomitantemente canciones en puro inglés, y sólo dos difundiendo en castellano. Y hay que advertir que aun las solitarias canciones con palabras en castellano no reflejaban una cultura original autóctona sino estaban entregadas alma, corazón y espíritu a la conquista vespucciana.
Una total abdicación de la esencia misma de un pueblo.
Esta sumisión a, y hasta búsqueda de, una obliteración foránea se da, no sólo en lo que se podría considerar, con indulgencia, el mundo de fantasía de vacías cabecitas de pájaro, sino también en la realidad práctica cotidiana.
^ En las emisoras donde había mensajes publicitarios, éstos estaban salpicados de marcas anglófonas.
^ Nosotros compramos cinco latas de anticongelante, pero se nos facturó, y por escrito, cinco latas de antifreeze.
^ Hoy en día, los coches ya no tienen cebadores sino choques - palabra, por colmo, que nada tiene en común con el sentido castellano de chocar sino que significa estrangular en sus muchas versiones, incluso obturar un carburador, del inglés choke.
^ Y todo el mundo habla de los chips de las computadoras sin darse cuenta, en su total ignorancia, de que cuando un anglófono habla de chip de una computadora no utiliza alguna palabra mágica o palabra técnica acuñada específicamente para la tecnología de las computadoras sino una palabra de uso >>>>>>>>