[*] Huesos y piedras también tenían otros usos en Rapa Nuí: un uso era la confección de anzuelos; los de piedra se hacían de basalto, los de huesos se hacían, por lo menos originalmente, de huesos humanos porque - ¿qué mejor material puede haber para anzuelos que huesos de los mejores pescadores fallecidos?

    Por lo menos, se nos dice que lo que vimos son anzuelos. Si son anzuelos, deben de ser anzuelos ceremoniales y, más que anzuelos, para nosotros son simplemente piezas de depurada estética y equilibrada elegancia aptas para provocar la admiración y envidia de cualquier amante de belleza pura.

[*] También vimos unos objetos ceremoniales de madera, especialmente unos colgantes exhibiendo las mismas calidades estéticas ya descritas; pero que no debían de ser ningún placer para lucir: cada uno pesa bastante, y se usaban en dos pares: un par, colgando sobre el pecho, y un par, colocado sobre los hombros.

[*] Finalmente, para no quedarse atrás en el renglón de los misterios pascuenses, vimos una estatuilla femenina que, según ciertos expertos, por sus rasgos faciales, su forma, y especialmente la postura de sus manos, sugiere una analogía, o quizás una relación, con una figura similar, con la misma posición de manos, elaborada en otras islas ... las islas del mar Egeo, entre los años aproximados de 3000 y 1800 a.C.

                               El arte desconocido de Rapa Nuí

[*] Ah sí, también vimos una de las famosas tabletas de madera, por lo menos una reproducción, con los apretados renglones de jeroglifos de la antigua escritura rongo-rongo de Rapa Nuí - porque hasta escritura había en dicha isla, casi islote, perdido en el medio del Pacífico; tabletas famosas por haber sido quemadas casi todas, en otro de los tantos actos de atrocidad cultural cometidos por los cleros invasores.

También aprendimos, incidentalmente, que, en las estatuas grandes, se pudo detectar una línea de evolución, con un principio alrededor del año 400 d.C., una definición de su estilo clásico hacia el año 700, y una culminación entre los años 1200 y 1450, cuando la teocracia imperante hasta entonces fue derrocada por un régimen militar.

Se calcula que, en dicho lapso, se talló alrededor de un millar de tales estatuas, algunas llegando a pesar más de cien toneladas.

En otro renglón, hicimos un poco de exploración radiofónica.

~ Por una parte, a veces no sabíamos si estábamos en Chile o en Vespuccia, tal era la proporción de emisoras cantando en inglés.

~ Por otra parte, notamos, con gran satisfacción para nosotros, que se puede escuchar música clásica, y de la buena, si no siempre, por lo menos frecuentemente, a muchas horas del día, sin tener que esperar la píldora clásica, de cada día, como en Mendoza, o de cada semana, como en La Paz; y con >>>>>>>>