situaciones, para comprobar resultados, o analizar diferencias de efectos a diferencias de causas. En Chacaltaya, no se puede repetir una situación a voluntad; hay que esperar que - tal vez - ocurra, y hay situaciones que realmente se dejan esperar. Por ejemplo, impactos de la más alta energía detectada hasta ahora, 1019 eV, ocurrieron sólo 44 veces en 20 años, lo que ciertamente no se presta a una rápida comprensión de un fenómeno.
En Chacaltaya, además, más todavía que en los laboratorios, la certeza de la buena calibración de los instrumentos es de importancia crucial; es así porque si, en un laboratorio, se observa resultados raros, siendo los parámetros conocidos, se puede hacer cálculos verificatorios, o se puede repetir el experimento, mientras que, en Chacaltaya, no habiendo nada conocido a ciencia cierta salvo el resultado observado, si éste es raro, hay que tener la certeza de que no fue una aberración del instrumental y, por lo tanto, de que, sí, fue un resultado realmente diferente de lo ya conocido.
Un dato adicional que, en los laboratorios, ciertamente no necesita investigación, pero que, en Chacaltaya, requiere un estudio por separado, es la dirección de arribo de las partículas. ¿Cómo se logra determinar la dirección de movimiento de una partícula sub-nuclear llegando de la inmensidad del cosmos? Muy fácil, en principio: basta una batería de detectores, quizás cinco, en colocación recíproca tridimensional, quizás una pirámide; viendo qué detector fue impactado primero y cuál luego, se tiene la dirección de movimiento - el mismo sistema que para la detección de la dirección de propagación de los terremotos. Pero imposible, en la práctica, hasta el perfeccionamiento de aparatos capaces de medir tiempo en nanosegundos.
No interesan, en Chacaltaya, energías inferiores a 1010 eV porque, por una parte, se encuentran dentro de las producibles por los aceleradores artificiales, que llegan hasta 1012 eV, y, por otra parte, son demasiado susceptibles a las influencias del cosmos durante su transmisión. Energía de 1015 eV es más estable y, consecuentemente, más fiable. Como ya dicho, la energía más alta detectada es de 1019 eV.
Así están pacientemente acumulando datos pescados del tremendo remolino cósmico: espectro de energía, composición nuclear, comportamiento temporal, interacción de alta energía, componentes muónicos, ondas radiales, y hasta ondas acústicas producidas por las partículas sub-nucleares en el medio atravesado.
Hablando de ondas acústicas producidas en el medio atravesado por las partículas, se está proyectando un observatorio "acústico" con sensores repartidos sobre quizás 200 kilómetros cuadrados cerca del lago Titicaca.
Naturalmente, vimos todos los aparatos - detectores, amplificadores, registradores, y digitadores. Ciertos detectores individuales están cubiertos, >>>>>>>>