Pudimos apreciarla viendo, lado a lado, las ruinas originales y una pequeña parte retocada con adobe de hoy. Naturalmente, ¿quién, hoy en día, se daría el trabajo y el lujo de cuidar y dejar madurar el adobe un año, o más, antes de usarlo?
De interés es que la esbeltez a la vista, originalmente, probablemente era diferente. Lo que se ve sugiere que los vanos de hoy son la combinación vertical causada por desmoronamientos parciales de adobe entre tres niveles de vanos originales: en planta baja, de portales; encima, de grandes ventanales; encima, de ventanas, ciertas de las cuales, hoy, todavía son enteras.
Por unas agarraderas talladas dentro de las piedras lujosas de los vanos de los portales, se especula que estos vanos pueden haber sido adornados con cortinados o estructuras en base a ataduras, pero más no se sabe. Todo es especulación.
Por otra parte, cada uno de estos once segmentos de lo que llamamos la división axial, está acompañado por dos columnas o pilares, una de cada lado, y construidas, también, en su parte baja, de piedras labradas y ensambladas a la manera incaica, y de adobe en su parte alta.
Todo lo anterior, dentro de un área rectangular circunscripta por un muro de piedras sólo tosco y no ceremonial, por lo que no se sabe qué relación podía tener este muro tosco con la susodicha división axial. Descubrimos dos detalles bien sorprendentes, por lo menos para nosotros.
¤¤ Uno, casi un secreto de fábrica: las piedras tan maravillosamente labradas y ensambladas de los Tahuantinsuyenses no son tan maravillosamente labradas y ensambladas por todas sus faces, sino solamente por la faz y las aristas que se ve. Por dentro de los muros, las maravillosas piedras quedan en bruto y ni siquiera se tocan, siendo el espacio vacío rellenado con otros materiales; lo que, evidentemente, hace el milagro de la mampostería incaica un poco menos milagroso. Pero aun así, no deja de ser bastante extraordinario.
El trabajo de la piedra en Rajrchi
¤¤ Por otra parte, vimos, no pudimos creer, pero sí, vimos, que toda esta elegantísima estructura de piedras hermosamente labradas y ensambladas, que hoy tanto se admira, en tiempos idos estaba tan inapreciada que estaba simplemente revocada. Vimos patentes restos de revoque tapando las maravillosas juntas de las piedras y las piedras mismas tan bellamente talladas; y no era revoque cualquiera: una vez colocado en su sitio, se lo quemaba para darle más resistencia y más vida, así como, si bien nos acordamos, se hizo con el piso de barro encontrado en la plataforma de Cochasqui al norte de Quito.
ШШШ Hay extensas ruinas de los aposentos de las ñustas, los Ajrlia Huasi. Estos aposentos se extienden por seis plazoletas cuadrangulares en hilera a lo >>>>>>>>