con toda su fama, es parte de una empresa mucho más compleja del vidrio; y que esta empresa, a su vez, y un museo, conforman un Centro del Vidrio.
Empezamos nuestra visita del Centro del Vidrio a las 11. A las 14, estábamos todavía ahí; a las 15, estábamos todavía ahí; y a las 16, estábamos todavía ahí. A las 16:30, finalmente, abrumados por todo lo que había para ver y todo lo que habíamos visto y aprendido, y dándonos cuenta de que ya no teníamos más poder de absorción, nos convencimos de que ya era suficiente así, y nos retiramos.
Salimos de Corning en dirección a la ciudad de Rochester, en busca de un lugar para pernoctar; y así sucedió.
Pero, esta mañana, al despertarnos, no pudimos con el genio, y, en vez de proseguir en seguida hacia Rochester, donde sin embargo nos espera la visita de las famosas fábricas Kodak, volvimos a Corning para un segundo vistazo a ciertos aspectos de la fabricación y de las aplicaciones del vidrio.
Así que, ayer pasamos allí cinco horas y media, y una hora y media hoy, un total de siete horas de descubrimientos de gran variedad y de gran interés. Por medio de obreros trabajando, de exhibiciones, y de varias películas, vimos mucho, y captamos algo, de la historia y de la tecnología del vidrio.
A ver si le ponemos un poco de orden.
El primer vidrio en la Tierra no fue hecho de mano de hombre; fue hecho por la naturaleza cuando ciertas erupciones volcánicas vomitaron obsidiana; pero sí, fue utilizado por el hombre - y la mujer - en varias culturas, para fabricar, por ejemplo, cuchillos, puntas de lanzas - y primitivos espejos también.
El primer vidrio hecho de mano de hombre se remonta a, por lo menos, 1500 a.C. Pero hay pruebas de que bolitas de vidrio ya existían 2.500 años a.C.
Ahora bien, cuando se habla de vidrio de aquellas épocas, no hay que dar a la palabra el mismo significado de material transparente que se le da hoy. Por lo que vimos, vidrio de aquellas épocas se parece más bien, por lo menos para el ojo inexperto, a huesos viejos o, en el mejor de los casos, a cerámica o porcelana; y, en todo caso, es perfectamente opaco.
Vidrio con algo del sentido que le damos hoy, o sea con algún grado de transparencia, o por lo menos de translucidez, según pudimos ver, apareció recién alrededor del nacimiento de Cristo.
El vidrio que se logra hacer hoy es, naturalmente, casi milagroso, en comparación.
La fórmula básica para fabricar vidrio requiere ingredientes bastante simples, hasta se podría decir vulgares: arena, el ingrediente principal, mezclada con >>>>>>>>