escalpaban sólo a guerreros ya muertos en batalla, como insignia, a manera de las condecoraciones blancas, sin matar a nadie haciéndolo - y de todos modos, ya que en las confrontaciones entre paraborígenes había pocos muertos, en escasa cantidad.

Así habló la matriarca.

Otra vez viajando; hacia nuestra próxima meta, una famosa fábrica de cristalería, Steuben, en la ciudad de Corning.

Parece que desde que dejamos Onondaga, el terreno se ha vuelto un poco más ondulado, más pintoresco y, no ilógicamente, menos agrícola.

Es antes de Onondaga que tuvimos muchas oportunidades de observar el estilo típico de edificios de establecimientos agropecuarios vespuccianos. Ya lo habíamos visto antes, y también habíamos visto el mismo estilo en Canadá; pero es aquí, porque no teníamos otra cosa que hacer, que pudimos observarlo bien. Todos los establecimientos de campo tienen el mismo tipo de edificios, a punto de parecer todos hechos con el mismo molde.

Siempre se ve

• una  línea  vertical, que  es un  silo, o quizás  dos o  tres  silos, torres >>cilíndricas bastante altas con techo semi-esférico,
• una línea horizontal, que es un largo establo para guardar el ganado,
• una línea en plano vertical, con tres quebraduras características, que es el >>techo de dos aguas y con cada lado quebrado en dos pendientes diferentes, de >>un enorme galpón con gran capacidad de almacenamiento para guardar tractores >>y otras maquinarias - de las cuales hay siempre muchísimo,
• y finalmente la casa vivienda,

  todo lo anterior, naturalmente, hecho de madera, madera y madera.

Hablando de cosas agrícolas, los campos desconocen por completo alambrados. Un campo de cultivo no necesita alambrado porque nunca se ha visto un choclo o una zanahoria o una papa levantarse y escapar; un campo de pastoreo se arregla muy bien con un solo hilito colgado de postecito en postecito, pero cargado de electricidad, argumento ampliamente suficiente para convencer a las vacas que es mejor quedarse adentro.

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Hoy es el segundo día después de las anotaciones anteriores.

Ayer de mañana, llegamos a Corning. Descubrimos que la fábrica de cristalería, >>>>>>>>