Por esta imprevista conversación con los dos trabajadores nocturnos, ya era noche cerrada y sellada cuando regresamos por los estrechos meandros de nuestra huella que nos había parecido ya bastante complicada aun con la luz del día.  Por lo menos ya teníamos tallados los túneles entre las ramas duras.

Y estamos otra vez ¿dónde? en Huanchaco, en nuestro dormitorio.

Ultimos pensamientos en cuanto a los Mochicas y a los Chimúes, estas dos culturas, ciertamente, pero de modo tan incierto, en relación de linaje.

* Los Chimúes habrán heredado y copiado y continuado varias características de la cultura mochica, pero entre éstas no figura la construcción de moles de adobe como las dos que acabamos de ver.

* Es un dogma que ninguna cultura suramericana precolonense llegó a inventar un sistema de escritura. Sin embargo, algunos espíritus inquietos que no se dejan hipnotizar por verdades recibidas interpretan ciertas combinaciones de puntos y líneas rectas en la cerámica mochica como escritura; y hacen notar que cada tal combinación siempre se encuentra dentro de su propio cartucho separado, de la misma manera que los glifos mayas.

  La candente pregunta evidentemente es: ¿por qué, entonces, no sobrevivió, no prosperó, tal sistema de escritura? Porque, dicen sus proponentes, los incas, al conquistar la zona, en un esfuerzo para eliminar todas las tradiciones y comunicaciones autóctonas, lo prohibieron y lo suplantaron por el quipú que solamente ellos entendían.

* Los Mochicas ya tenían, y los Chimúes siguieron desarrollando, un sistema de comunicaciones por caminos estructurados, y un sistema de correo - correo oficial administrativo, se entiende - por chasquíes, cuyas existencias desaparecen bajo la fama de los caminos y de los chasquíes incaicos - los que, sin embargo, no fueron más que la continuación de los sistemas mochica-chimúes.

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Esta mañana, amanecimos otra vez con el mismo sudario gris de niebla estática, más propio, o por lo menos más comúnmente imaginado, en latitudes altas que en los intertropos.

Por otra parte, la ambitura está notablemente fresca. Al mediodía, el Sol aprieta un poco, pero la menor brisa enfría el aire muy agradablemente; y temprano en la mañana, con la brisa del mar, hasta se puede usar un chaleco, a pesar de encontrarnos, por una parte, apenas en el paralelo 8 o sea todavía mucho más cerca del ecuador que del círculo tropal del Capricornio, y, por >>>>>>>>