sesenta y tres hombres a caballo contra todas las incógnitas del imperio. No sabemos si la obligada presencia clerical estaba dentro de, o en adición a, estos guarismos.

Debarca en Tumbes.

Y emprende la ardua, titánica, marcha, desde Tumbes, a orilla del mar, hacia Caxamarca, en los enredos de los Andes, donde, a la sazón, se encuentra Atahualpa.

Caxamarca.

Hay que imaginarse el primer contacto personal entre emisarios de ambos lados, el intercambio de emisarios, la discusión de detalles para el encuentro personal del soberano y del forastero; el primer contacto visual, la primera evaluación visual mutua, entre emperador, con su corte, y aventurero, con sus bandidos.

No entendemos cómo puede haber, en los relatos de este encuentro, dos versiones del episodio crucial que Pizarro aprovechó para desenmascarar su traición.

La cosa empieza con la versión única de que, cuando el fraile Vicente de Valverde tuvo la osadía - y el desatino - en ese primer encuentro de tratar de explicar a Atahualpa las creencias cristianas, Atahualpa le indicó que le alcanzara la biblia y la tomó en la mano.

Pero luego - según una versión, la puso al oído y como nada oyó, la tiró al suelo; y según otra versión, la quiso abrir, pero no lo logró, por un pequeño seguro, cuando Valverde extendió su brazo para mostrarle cómo abrirla; cuando Atahualpa le golpeó en el brazo para impedírselo, trató otra vez de abrir la biblia, lo logró, y la tiró al suelo.

De cualquier modo, la biblia en el suelo fue el pretexto para el grito de "Santiago" como señal para empezar la carnicería planeada.

Los compinches de Pizarro resultaron tan sanguinarios que Pizarro, no por dulzura o caridad sino por designios ulteriores, tuvo que proteger su víctima, Atahualpa, contra una muerte inmediata - y con tanta violencia que recibió una herida en la mano por uno de sus propios co-asaltantes.

Luego, el famoso convenio de una habitación llena una vez de oro y dos veces de plata, como rescate para la libertad de Atahualpa.

Luego, la decisión de matar a Atahualpa; claro que con teatralización legal como condena a muerte.

¿Por qué? A más de explicaciones estereotipadas que cualquiera puede aducir, como ser que corrían rumores de que se preparaba un ejército para liberar a Atahualpa por fuerza, como ser que el propio Atahualpa liberado por rescate >>>>>>>>