!/ los brazos, también con sus rayas negras; y hasta las puntas de los dedos pintadas de negro;
!/ luego, debajo de la cintura, una falda - sí, estamos hablando de los hombres - una falda de tela alternando bandas horizontales negras y blancas, llegando hasta las rodillas;
!/ y, finalmente, las piernas, de la falda para abajo, también pintadas de bandas horizontales como si fueran la continuación de las bandas de la falda.
Con más paciencia, descubrimos en la muchedumbre algunos ejemplares más de esta especie en extinción; y también mujeres.
Una mujer que andaba desnuda de la cintura para arriba, también lucía su torso y su cara pintados de rayas; y su pollera también tenía el mismo dibujo uniformado de bandas horizontales como los hombres, pero de colores vivos, en vez de blanco y negro.
Naturalmente, tomamos todas las fotografías que pudimos, y naturalmente que lo hicimos con nuestro astuto lente a 90 grados para no despertar la atención y no ofender a la gente, pretendiendo siempre que el fotógrafo tomaba fotografías de Božka, la que se paraba a 90 grados de nuestra presa fotográfica; bueno, la gente no sabía qué hacíamos, pero algo le habrá parecido raro porque, eventualmente, se acercó una mujer y nos preguntó por qué queríamos sacar tantas fotografías de Božka.
Estas fotografías seguramente pronto serán piezas de museo porque seguramente han de ser entre las últimas tomadas de una especie en vía de extinción.
Sin embargo, esta misma circunstancia de haber presenciado los últimos momentos de una especie casi extinta, nos dio el privilegio de ver, al mismo tiempo, la adaptabilidad de esa especie, la manera cómo, mientras el tronco se está muriendo, algunas de las ramas se están adaptando a un ambiente nuevo, aun cuando sin mucha esperanza de sobrevivencia por la poquedad de los individuos estantes. Sumamente interesante como ilustración de evolución.
Mientras vimos solamente tres o cuatro ejemplares tradicionales como descritos más arriba - todos, hombres y mujer, maduros y ya de otra generación;
./ también vimos mujeres más jóvenes, vestidas enteramente, con solamente su falda uniformada de bandas horizontales;
./ también vimos cinco o seis hombres más jóvenes mezclando, con perfecta naturalidad, el pantalón y la camisa de todo el mundo con su peinado recortado, empastado, achiotado, tradicional;
./ también vimos un hombre con el pantalón y la camisa de todo el mundo, y su cabello recortado en la forma típica tradicional pero ya no empastado, ya no pintado del rojo del achiote;
./ y, finalmente, vimos otro ejemplar de esta especie en extinción tratando de >>>>>>>>