pintadas de manera atractiva; pero, por lo que vimos, si tales casas existen, deben de ser el secreto mejor guardado de la ciudad.
»« Según nuestra información, el parque Concordia tendría que ser único y tendría que tener un modelo a escala de las ruinas de Copán; pero del parque se puede decir que es una plazoleta sombreada y nada más, y en cuanto al modelo a escala de las ruinas, simplemente no lo hay - lo que hay, es las copias de unas esculturas, y no solamente de Copán sino también, por lo menos una, de Chichén Itzá, así como un modelo a escala reducida de algo que llaman pirámide, pero que cualquier alumno de geometría puede decir que pirámide no es, también de Yucatán; un zigurat.
»« Según nuestra información previa, a la derecha de la iglesia de Los Dolores, tendría que haber una capilla de Fátima importada de España; por lo que descubrimos, no hay tal capilla Fátima a la derecha de la iglesia de Los Dolores sino que, dentro de dicha iglesia, hay un altar lateral importado de España.
»« Otra información que teníamos, y que no llegamos a entender, es que Tegucigalpa tiene el privilegio de no haber sido alcanzada por ningún desastre o terremoto, y que, por lo tanto, aparte de modernizaciones viales, guarda más o menos su personalidad de antaño; si lo que vimos son modernizaciones viales, es de preguntarse cómo era antes; y en cuanto a su personalidad, no sabíamos que consternante mediocridad es personalidad.
\TG/ La catedral de San Miguel sí tiene dos puntos de interés, uno intelectual >>>>>y el otro visual.
«» El interés intelectual es que fue revocada con mezcla de cal, leche y huevos - unos cinco millones de yemas; lo que no tiene por qué parecer increíble porque casos de uso de huevos en construcción se conoce aun en Europa - por ejemplo, en la propia argamasa del puente del rey Carlos IV, en Praga.
«» El interés visual es que tiene el altar hecho de plata; por lo menos, en este caso, el efecto resulta más sobrio y placentero que en el caso del tabernáculo de Comayagua porque, aquí, la plata tiene la patina del tiempo y un color muy oscuro.
Otra cosa, algunas de las calles de Tegucigalpa se vuelven muy empinadas, tan empinadas como ciertas calles de San Francisco de Alta California.
Ah, sí, hay que corregir una impresión previa. Descubrimos que una minúscula cantidad de calles en el puro centro tiene los nombres marcados.
Hablando de calles y direcciones, aun cuando pedimos direcciones de lugares tan básicos como la catedral o el parque Concordia, nadie fue capaz de darnos unas indicaciones claras y completas; lo que decían nos servía para las próximas tres a seis cuadras, y había que preguntar otra vez - de todos modos, >>>>>>>>