Así que, mientras que nadie en ese grupo sabía dónde se encontraba cierta dirección - por calle y número - que estaba a una cuadra, todo el mundo conocía qué había ahí.
Fue una revelación.
Finalmente, nos dimos cuenta de que las direcciones se especifican no por calle y por número de edificio sino por asociación con algún punto de referencia que nadie puede no conocer - se supone inclusive ni un recién llegado que no sabe nada de nada. Por ejemplo, vimos un cartel indicando la nueva dirección de un negocio que se había mudado como: "En frente de tal edificio, al lado de tal negocio, detrás de tal iglesia, y una cuarta especificación que, ahora, ni nos acordamos". En el momento, como era un cartel casero pintado a mano, no le dimos la importancia histórica que se merecía; pero luego vimos, en el envoltorio de una mercadería, la dirección de la fábrica dada exactamente de la misma manera, no por nombre de calle y por número de edificio sino por asociación con puntos de referencia de evidente conocimiento público.
Para averiguar dónde estaba el consulado de Costa Rica o el consulado de Nicaragua, no caímos en el error fatal de preguntar dónde estaba la dirección, sino dónde estaba el consulado.
Incidentalmente, en el consulado costarricense, Karel tuvo la suerte de encontrarse con un Hondureño que cruza cada mes regularmente Nicaragua en un viaje de Honduras a Panamá, y este Hondureño le aseguró a Karel, de la manera más tranquila y convincente, que en Nicaragua todo está tranquilo, que a él nunca le había pasado algo, y le mostró su pasaporte lleno de sellados de Nicaragua para convencerle.
Así que, por ahora, y salvo datos contrarios, parecería que vamos a ir; pero, por la duda, nos vamos a preparar para poder satisfacer eventuales contribuciones de tributos de guerra - por la duda.
Por otra parte, volviendo a la ciudad de Tegucigalpa, en cuanto a su aspecto urbanístico, todavía no vimos todo, pero lo que vimos parece un arrabal sin fin. Vamos ahora a visitar unos puntos supuestamente de interés, y luego veremos.
\TG/ Visitamos, y sabemos.
Honduras parece ser el país donde más informaciones previas que teníamos no corresponden a la realidad.
»« Para empezar, cuando viajamos hacia Tegucigalpa, pasamos a lo largo del lago Yojoa que, según la información, sería hermosísimo; pero, por lo que vimos, lo único que se podría decir es que es un lago de cierta extensión.
»« Según nuestra información, en Tegucigalpa, muchas de las casas están >>>>>>>>