Anocheció; paramos.
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Esta mañana, apenas echamos a andar - a unos 70/80 kilómetros del pueblo de San Quintín - estamos enfrentando extensiones tras extensiones de desmentida a la imagen de una Baja California sinónima de desierto árido y rocoso: las sierras se apartaron lejos a la izquierda; de ambos lados de la carretera, hay grandes campos llanos, unos, bien cultivados, otros, como pastaje para vacunos.
Un poco después del pueblo de San Quintín, nos desviamos de la carretera para pasar un rato en la playa del Pacífico. No fue una experiencia muy exótica que digamos; nos encontramos con una docena de coches de turistas, todos de Alta California. Sin embargo, un poco de costado, había un grupo de lugareños acopiando almejas gigantescas; compramos una docena, directamente del mar, bastante grandes, con verdaderos pedazos de carne adentro; nos las comimos en seguidita, crudas, con limón.
La playa estaba llena de un tipo de conchas bastante circulares y bastante chatas; cada una, en una faz, con un dibujo muy delicadamente grabado, como de una hoja de cinco lóbulos, y, en la otra faz, otro dibujo, igualmente delicado, pero de un tipo geométrico expandiéndose del centro hacia la circunferencia; los lugareños las llaman catarinas.
Y los Vespuccianos ¡sand dollar! ¡dólar de arena!
Así que, dentro de todo, fue un rato agradable.
Ahora, seguimos viaje.
Mientras estábamos grabando, llegamos al pueblo de El Rosario, por un pedazo de camino que, de llano, se volvió, de repente, sumamente quebrado. Nos podemos imaginar cómo era viajar por este trecho cuando no estaba asfaltado.
Aquí, en El Rosario, según la información que teníamos, se descubrió grandes cantidades de fósiles de varios animales, inclusive de dinosaurios.
Es que, todos esos millones de años atrás, cuando esta, hoy, península era todavía parte firme de tierra firme, había humedad, por ende, vegetación, por lo tanto, animales.
Empezamos a hablar con uno y con otro, hasta que dimos con uno de los notables del pueblo; y aprendimos lo siguiente.
Sí, es cierto que hay fósiles en la zona, no en cantidades tremendas, pero sí substanciales, incluyendo un dinosaurio con alas, que parece ser el único de su tipo descubierto hasta ahora; también hay fósiles de animales acuáticos, >>>>>>>>