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Según ya nos pasó varias veces en una variedad de lugares de la Expedición, otra vez tenemos que pensar en que no todo está sin problema en el sitio adonde nos dirigimos. No, no se trata de guerrilla política, de violencia cocainera, de condiciones climáticas catastróficas; se trata, según escuchamos por radio, de huelgas con violencia callejera en Bélgica, por donde nos convendría pasar, aunque sólo sea porque parece que su nafta es más barata; y se trata de otras huelgas, también con violencia callejera, en expansión desde hace varios días, y "sin fin a la vista" según la información, en Francia, lo que incluye el ducado de Lorena, siempre dentro de la capa cronológica en la cual estamos viajando.

Parece que tal aprensión por anticipado tuvo que repetirse una última vez antes del fin de la Expedición, como manera de vivificar recuerdos y emociones.

Y una luz de posición se está encaprichando doblemente; no sólo no quiere prender sino que, además, impide por su no-funcionamiento cuando tendría que funcionar, el funcionamiento de la luz direccional, la que, por otra parte, prende bien. Nada incapacitante, si bien habrá que solucionarlo; pero, otra vez, como para vivificar recuerdos; recuerdos de diferencial roto, en la Patagonia; de pérdida de aceite en el eje trasero, obligando a frecuentes reposiciones de aceite en el diferencial durante los mil kilómetros, o cuántos fueron, en México, hasta llegar a un taller con los repuestos necesarios; recuerdos de rotura de manguera de radiador en la desolación desértica entre Bolivia y Chile; de rotura de caño de calefacción, lo que incapacitaba no sólo la calefacción en frioturas congelantes sino también el enfriamiento del motor, necesario aun en ambituras bajas, en los salares del Aucanquilcha; recuerdos del pavoroso ruido en la parte baja trasera del vehículo, que nos helaba la sangre cada primera vuelta de rueda, en gran parte de los lugares más aislados de la Amazonia, del cual ruido nunca supimos ni sabremos el origen; recuerdos de la pérdida de líquido de dirección, en El Salvador; y más recuerdos ...

En realidad, ahora mismo tenemos que estar agregando líquido de dirección para ir compensando una pérdida, pero ésta es más seria porque, en El Salvador, era sólo de manguera, aquí, parece que hay que desmontar toda la caja ...

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Cruzada la frontera desde Alemania al primero de los países bajos, Groningen. Manera de hablar: cuando, en cautelosa aproximación, estábamos procurando ubicar, visualmente, en la distancia, el puesto de salida alemán y cuando creímos que lo habíamos vislumbrado, nos encontramos con un cartel rezando ... "Nederland", y, a pasos, el puesto - de entrada a los Países Bajos. No había habido puesto alemán. No había nadie en la caseta - no, no vamos a decir neerlandesa, como lo manda la costumbre, vamos a decir nederlandesa, como lo >>>>>>>>