Mientras tanto, todavía tiempo para más en cuanto a Andorra.

Descubrimos que no todas las iglesias románicas - y, naturalmente, nuestras observaciones toman las iglesias románicas solamente como símbolo de cualquier arqueología bajo el Sol - que no todas las iglesias románicas padecen el ardor de los destauradores; descubrimos que, al contrario, algunas iglesias románicas gozan la bienaventuranza de ver sus destauraciones de siglos anteriores eliminadas a favor de su aspecto en siglos aún anteriores, o sea de verse realmente re-stauradas.

+ En una iglesia se encontró que el aparentemente inocente revoque interno era, en realidad, un dementado revoque cubriendo, obliterando, agraviando, murales anteriores; y se emprendió la ardua tarea de pelar el revoque y de vivificar un poco los murales. De manera que hoy, otra vez, los diablos cocinan a los pecadores en sus calderas, y los justos, otra vez, disfrutan los eternos deleites del paraíso.

+ En otra iglesia, se encontró una cavidad debajo del altar, y en la cavidad, pedazos de terracota; resultaron ser pedazos de una gran estatua, de Cristo en posición de crucificado, pero sin la Cruz; estatua tamaño más o menos natural, y hueca - en otras palabras, algo como las estatuas que vimos en la arqueología totonaca en México. Y, ya que cruz no había, se infirió que posiblemente la posición original de la estatua había estado directamente en una de las paredes; y se inspeccionó, y se encontró los indudables indicios del sitio; y se decidió preparar el sitio para recolocar la estatua en su sitio de antaño; y, al preparar el sitio en la pared, se descubrió que había, perdidos debajo de un revestimiento, pinturas murales - justamente en cuatro panales como los cuatro cuadrantes delineados por el espacio de una cruz. Y así es que, hoy, el Crucificado, o mejor dicho sus pedazos parciales que sugieren su totalidad, ya que algunos pedazos resultaron irreconstituibles, está otra vez en su sitio original contra un fondo de cuatro murales definiendo una cruz otra vez a la vista.

      
                 
                 La iglesia San Juan de Canillo, siglo XII: adentro y afuera

. .
*
▪

Esta mañana, no más niebla. Larguísima y muy retorcida bajada. Hicimos muy bien en no meternos en la vista tapada de ayer.

Centro aduanal regional.

Sorpresa, sorpresa, sorpresa.

» Primero, se nos informó, los días que pasamos fuera de la Comunidad no se descuentan, los perdemos como si hubiésemos estado en la Comunidad.

» Segundo, de todos modos, los Ingleses nos dieron un permiso de un año para la Comunidad, que los demás miembros de la Comunidad no reconocen, porque los Ingleses siempre quieren hacer las cosas a su manera.  El tiempo máximo >>>>>>>>